EDITORIAL
Pasaportes de vacunación
A pesar de que famosos sin el menor conocimiento médico como Victoria Abril o Miguel Bosé cuestionen su eficacia, hay que seguir insistiendo en que las vacunas son la gran esperanza para la normalización de la vida ciudadana frente a la Covid. Su eficacia está probada y avalada por los especialistas médicos y todas las agencias de medicamentos y además se está demostrando que la generalización de las vacunas en países como Israel o en las residencias en España rebaja drásticamente los contagios hasta generar inmunidad.
Siempre ha habido terraplanistas y conspiranoicos, pero negar la eficacia de las vacunas es una muestra de ignorancia científica y médica, cuando más necesarias son por la aparición de nuevas cepas, con más capacidad de contagio, que han obligado a ser prudentes y frenar el ritmo de desescalada. Hay que confiar en el aumento de la producción de vacunas para que se pueda generalizar su suministro y acceder a esta inmunidad que facilitaría la normalización de la vida.
En España, la actual normativa legal no contempla como obligatorias las vacunas, a diferencia de lo que sucede en otros países como Italia, Francia o Polonia, aunque podrían establecerse excepciones en situaciones extraordinarias o por mandato judicial, pero de momento el gobierno no contempla la obligatoriedad aunque en Galicia ya se hayan aprobado iniciativas en este sentido. Lo que sí se están preparando son los pasaportes de vacunación que la Unión Europea quiere implantar para este verano y facilitar la movilidad a quienes ya estén inmunizados.
A falta de concretar las condiciones técnicas, la decisión está tomada para favorecer la reactivación del turismo y descartando las reticencias de quienes planteaban que podía ser una discriminación porque también hasta ahora se exigían determinadas vacunaciones antes de entrar en algunos países. También podría exigirse para acceder a determinados recintos o participar en actos concretos con la garantía de que no habría contagios.
Antes, en cualquier caso, habrá que generalizar las vacunas, conseguir que se aumente la producción y se suministre a porcentajes mayoritarios de la población.
Rey reincidente Apenas dos días después de la conmemoración de los 40 años del fracaso del golpe del 23-F, en el que su hijo Felipe VI reivindicó su actuación y su figura, Juan Carlos I vuelve al primer plano de la actualidad al pagar a Hacienda más de cuatro millones en una segunda regularización fiscal. Reconoce ahora que la cuota defraudada es mucho mayor y todos podemos dudar que sea “completa y veraz” como exige la ley.
Y además hay otras tres líneas de investigación sobre Juan Carlos abiertas por el Tribunal Supremo.