EDITORIAL
Aprender de los errores
Se acerca la campaña de la fruta y ya empiezan a verse personas sin techo por el Baix Segre y también por Lleida en busca de trabajo, mientras la situación sanitaria sigue registrando índices negativos en nuestra región sanitaria, que dobla la media catalana de rebrote e incidencia de contagios. La amenaza de que se repita la triste historia del año pasado con un rebrote de la pandemia y un tormentoso y excepcional confinamiento del Segrià en plena campaña de la fruta vuelve a planear sobre todos, y más después de que en Aragón ya han decretado medidas más restrictivas en las zonas limítrofes de Fraga y la Litera que comparten la problemática.
Cabe esperar que hayamos aprendido de la experiencia y se corrijan los errores cometidos el año pasado, pero a la vista de las reuniones sectoriales mantenidas da la impresión de que no se han alcanzado consensos entre los productores, los sindicatos y la administración. La consellera Budó visitará hoy la zona para coordinar las actuaciones y está previsto que técnicos de Salud Pública asesoren a las empresas agrarias de las medidas preventivas, y que haya inspecciones y cribajes con tests cada dos semanas a los trabajadores y cuando se detecten posibles brotes.
También los ayuntamientos, como el año pasado, están haciendo un esfuerzo para habilitar módulos que puedan servir para posibles aislamientos, y habría que reclamar coordinación con el gobierno central para que no lleguen personas que no tengan contrato de trabajo, de forma que el confinamiento actual que nos afecta a todos sea efectivo también para los que llegan y se mueven sin ningún problema. La petición de los ayuntamientos de una campaña de vacunación específica para los trabajadores de la fruta ha sido descartada de momento por Salud, pero cabe esperar que el índice de vacunación que llevamos sirva para evitar la multiplicación de casos que sufrimos el año pasado.
Sería importante que se alcanzara un gran consenso para evitar la repetición del problema y que no vuelva a coger por sorpresa al Govern como sucedió el año pasado.
Noventa años de una ilusión Ayer se cumplieron 90 años de la proclamación de la República tras el triunfo de las candidaturas republicanas en unas elecciones municipales. El entonces rey, Alfonso XIII, abandonó España, se proclamó la República en medio de una gran euforia ciudadana y empezó un ilusionante periodo de reformas políticas, sociales y económicas que se frustró cinco años después con la sublevación del Ejército y una guerra incivil que duró tres años.
Mucho ha cambiado el país y muchos intentos hay de reescribir la historia, pero la proclamación de la República fue un triunfo de la democracia y el nacimiento de una ilusión.