EDITORIAL
La Fira de Mollerussa abre el camino
Cuando aún no habíamos descubierto la magnitud de la tragedia que nos acechaba con el coronavirus, la Fira de Sant Josep de Mollerussa intentó hasta el final mantener su edición del año pasado. No pudo ser porque llegó la declaración del estado de alarma y el cierre de toda actividad no esencial.
Fue la última en cerrar y ahora la Fira ha sido la primera en abrir de forma presencial cuando afortunadamente la pandemia parece en sus últimos estertores y como adelanto de una normalidad que todos esperamos para este verano en ferias y fiestas mayores. Bienvenida sea esta 148 edición de la Fira, que ha trasladado sus fechas de marzo a junio y que ha tenido que extremar las medidas de seguridad contra la Covid, pero no ha perdido un ápice de su pujanza, ni de su atractivo para el sector agrario.
La mejor demostración son los 153 expositores que acuden a la feria y que ocuparán hasta 13.000 metros cuadrados de superficie neta para garantizar las distancias mínimas y evitar cualquier aglomeración. Hay ganas de feria, de recuperar el contacto entre los expositores y los potenciales compradores, de poder analizar las novedades que se presentan, de compartir las experiencias de tantos meses de aislamiento, de mirar los vehículos expuestos en el salón del automóvil, que en ediciones anteriores marcaba récord de ventas o de participar en las jornadas técnicas, aunque hayan tenido que adaptarse al formato telemático y que abordarán cuestiones tan candentes como la implantación de renovables, el relevo generacional en la payesía, las nuevas tecnologías al servicio de la plantación de frutales o el impacto ambiental en el porcino.
Hay ganas de vivir lo que es una feria tradicional y que la de Sant Josep ha representado siempre como símbolo de una normalización, de una superación de la pandemia aunque haya que recorrer los estands con mascarilla, y también de recuperar el pulso en las transacciones, en las oportunidades de negocio, en las posibilidades de inversión o en la mejora de las instalaciones. Así que a disfrutar de la Fira durante todo el fin de semana.Vuelven las fiestas mayoresA partir del lunes se levanta la prohibición vigente de celebrar verbenas y fiestas mayores, según decidió ayer el Procicat, en un nuevo avance hacia la normalización, que se acompaña de la autorización de festivales escolares o actos de graduación en el fin de curso y la ampliación de aforos hasta un 70 por ciento en ceremonias como bodas.
Los datos sanitarios van bien y es normal que se reflejen en una vuelta a la normalidad que podría culminarse este verano, en el que tras un año negro por fin podremos volver a disfrutar de las verbenas y las fiestas mayores. Con todas las precauciones necesarias.