Los pueblos languidecen

Demasiado a menudo nos tenemos que referir a la que parece inexorable despoblación de las zonas rurales y de montaña. Poco a poco van perdiendo habitantes y esto se traduce en una cascada de cierres de todo tipo de establecimientos que, para subsistir, deben contar con el apoyo ciudadano y, por supuesto, de las administraciones. Este preludio viene a colación del reportaje que publicábamos el domingo sobre el cierre en un corto período de tiempo de panaderías en varias poblaciones de Les Garrigues.

Esta comarca es conocida por su aceite de gran calidad, pero, si tuviéramos que elegir otro elemento característico y diferenciador, este sería su pan, en especial el pa de ronyó, y otros productos, tanto dulces como salados, que se elaboran en estos establecimientos. Así, dábamos cuenta de que comercios de Arbeca, Vinaixa, Cervià o Les Borges se sumarán a otros que ya han desaparecido recientemente, como el de Els Omellons, que bajó sus persianas hace poco más de un año, con lo que, a su vez, dejó de suministrar un producto tan básico como el pan a otros municipios colindantes. Las razones que arguyen los propietarios son la paulatina pérdida de clientes, consecuencia clara de la despoblación; el aumento de los costes de producción, la falta de relevo generacional, ya que prefieren que sus hijos se dediquen a labores más productivas y menos obligadas, así como la competencia que suponen áreas comerciales y supermercados, con cuyos precios no pueden competir.Así las cosas, sería necesario que las administraciones competentes implementaran medidas para arraigar a este tipo de profesionales artesanos y a sus vecinos en sus territorios.

No se puede medir con la misma vara el nivel de negocio de una gran urbe con una pequeña población, por lo que las soluciones a plantear deben responder a la idiosincrasia de cada zona. Estos pueblos necesitan comercios, al igual que escuelas o locales sociales, y que quien los gestione pueda ganarse la vida. Porque se trata mucho más de una necesidad social que de ayudar a un negocio pensando solamente en beneficios económicos.

Vacuna sobre vacuna

El Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC) y la Agencia Europea del Medicamento (EMA) han recomendado comenzar ya con la administración de la segunda dosis de refuerzo de la vacuna contra la Covid-19 en mayores de 60 años y personas vulnerables de cualquier edad, así como continuar quizá con nuevas dosis en un futuro próximo. Veremos qué respuesta tiene esta recomendación tanto entre las diferentes administraciones como entre la ciudadanía.