EDITORIAL
Conjugar el verbo 'compartir'
Romper el tabú de la soledad entre las personas mayores con palabras. Este fue el tema central del acto celebrado el martes en Lleida para poner en valor el programa Sempre Acompanyats que la Fundació “la Caixa” lleva a cabo junto a la Paeria y Creu Roja. Un total de 78 leridanos se han beneficiado este año de este acompañamiento gracias a la labor de una veintena de voluntarios y una docena de entidades.
Hablar sobre la soledad, agravada, pero a la vez visibilizada por la pandemia, además de concienciar a la población sobre sus efectos, es el principal objetivo de un acto que la semana pasada ya se hizo en Tàrrega, así como en otras ciudades catalanas. El director del Programa de Gent Gran de la Fundació “la Caixa”, David Velasco, señaló que la soledad se puede reconocer y trabajar para romper este sentimiento, que puede generar otros problemas de salud o sociales. “Es importante tejer alianzas”, destacó.
Por su parte, la presidenta de Creu Roja en Lleida, Dolors Curià, señaló que este acompañamiento mejora la calidad de vida de las personas mayores. Mientras, el alcalde de Lleida, Miquel Pueyo, instó a seguir colaborando entre entidades y administraciones para que “la soledad sea menor y menos dolorosa”. En la provincia de Lleida, un total de 17.100 personas de más de 65 años viven solas, de las que más del 62% son mujeres.
No podemos hacer más que aplaudir estas iniciativas e incentivarlas en todas sus vertientes, desde una mayor promoción e involucración en los casals d’avis hasta la implantación general de las aulas de extensión universitaria, que son también una excelente oportunidad para ampliar y compartir conocimientos para las personas que han disminuido o cesado su vida laboral. Compartir, debatir, comunicar y conocer siempre son verbos bienvenidos para esquivar las soledades no deseadas, pero conviene también no demorar el debate sobre un cambio radical en las formas y maneras de enfocar la tercera edad de miles de leridanos para cambiar las guarderías de gente mayor y comenzar a aplicar estos verbos ya mencionados en las residencias, las actuales y las futuras.
Separación de poderes
El juicio contra miembros de la mesa del Parlament de Catalunya es una muestra más de que parte del poder judicial ha intentado en los últimos años en España cruzar la línea de la separación de poderes, sagrada en toda democracia, para imponer por la vía de las leyes su forma de entender la justicia y la pluralidad política. En el Parlamento y el Congreso, en el que recae la soberanía popular, se ha de poder debatir y hablar de todo, desde la monarquía al aborto o el sexo de los ángeles. Los jueces están para aplicar las leyes, no para dictarlas.