EDITORIAL
Tratos vejatorios intolerables
El trato vejatorio, insultante y degradante que han exhibido estos días los representantes de Ciudadanos y Vox contra la ministra de Igualdad, Irene Montero, demuestran que la violencia política que ejercen algunos representantes de la derecha española contra todo tipo de progresismo no tiene límites. Ciudadanos es experto en alterar la concordia y educación de los parlamentos y ya convirtió la Cámara Catalana, en otro tiempo calificada como un oasis, en un estercolero donde todo tipo de descalificaciones cabían. Los votantes les han ido apartando en las urnas y sus intentos de crispación general las han trasladado también al Congreso y a algunos ayuntamientos, sabedores de que Vox lleva camino de dejarles sin representación.
De Vox poca cosa hay que decir que no sea su total desprecio por los derechos sociales y de igualdad que han costado mucho conseguir y que su única hoja de ruta es volver a la España más negra y retrógrada, gracias a la democracia superada. Cabría pedir al otro representante de las políticas conservadoras españolas, el PP, que no cayera en la trampa de ponerse a la altura del menosprecio que ejercen estos líderes sobre las personas que piensan diferente y que defendieran sus ideas y propuestas, tan lícitas como cualquier otra, sin caer en las ofensas personales, que también ha padecido alguna de sus representantes. La ley del sí es sí o cualquier otra reforma legislativa se puede debatir, discutir y criticar, pero intentar humillar a una ministra, o a una cajera de supermercado, tanto da, por quién es su pareja es inadmisible y machista.
Y son actitudes como estas y la negación sistemática de la violencia contra las mujeres, que hoy conmemora el día internacional, las que impiden avanzar hacia un mundo sin techos de cristal y en el que el respeto al prójimo, en este caso a la mitad de la población mundial, siga teniendo grandes asignaturas que aprobar, desde las comarcas de Lleida a los países donde sus derechos están totalmente limitados y supeditados al varón, como desgraciadamente comprobamos cada día y constatamos en prime time en el Mundial de Catar.
Presupuestos del Estado
El Gobierno español de PSOE y Podemos logró ayer 187 apoyos gracias a sus socios de investidura e independentistas vascos y catalanes, con lo que aprueba de nuevo los Presupuestos Generales del Estado, que tras pasar una pandemia que acarreó desaceleración económica en muchos sectores y en plena guerra de Ucrania supone una buena noticia para dotar de cierta estabilidad en estos años de recesión a la que la geopolítica mundial nos ha arrastrado. Todavía hay muchos conflictos por resolver, pero al menos el sí a las cuentas puede aliviar tensiones.