SEGRE

Creado:

Actualizado:

La semana que acabamos de empezar se prevé caliente en cuanto a reivindicaciones y protestas laborales, que afectarán al sector de la educación, al de la justicia, al de la sanidad y, en el caso de Barcelona, también al taxi. En el tercero de los casos, y si las negociaciones de última hora no lo remedian, los facultativos de Catalunya están convocados mañana y el jueves a una huelga instada por Metges de Catalunya, el sindicato mayoritario, para conseguir toda una serie de mejoras ante la sobrecarga laboral que sufren, la falta de profesionales y con los sueldos más bajos de España. La protesta llega después de años de recortes y de una presión asistencial cada vez más acuciante, agravada por la sobrecarga, tanto laboral como anímica, de los más de dos años de pandemia, que colapsó el sistema y que requirió un sobreesfuerzo encomiable del sector sanitario.

Los médicos exigen medidas para mejorar su situación laboral pero ello debe repercutir directamente en la atención que reciben los usuarios, que, progresivamente, se va viendo mermada y no por la desidia de los facultativos sino porque no dan abasto y tienen una sobrecarga burocrática inasumible.Prueba de ello la teníamos en la edición de este periódico del domingo cuando dábamos cuenta que un total de 9.721 personas del Llano de Lleida y del Pirineu i Aran estaban en lista de espera para someterse a una operación quirúrgica al acabar 2022. Esta cifra, ya de por sí escandalosa, supone un incremento del ocho por ciento con relación a la del año anterior. En cuanto a las intervenciones, tres de ellas arrastran una demora media de más de un año: hace falta aguardar 396 días para una operación de hernia discal, 391 para una de musculatura ocular y 382 para una de columna.

Otras trece dolencias superan los 200 días de espera, entre ellas diversas del tipo oftalmológico. Y si el apartado quirúrgico está colapsado, como demuestran estos datos, igual o peor se presenta el referente a diagnósticos.  Así, a finales de año había 15.044 pacientes aguardando una prueba médica, casi un 27% más que al acabar 2021, con electromiogramas y TAC a la cabeza. Tampoco mejora el tiempo de espera para una consulta, problemática que afecta a más de 18.300 leridanos, con especial incidencia en las enfermedades traumatológicas y dermatológicas.

En definitiva, nos encontramos ante una situación que requiere adoptar ya medidas urgentes y contundentes. El estado del bienestar que tanto costó instaurar, con dos pilares básicos como son la sanidad y la educación, debe ser mantenido y reforzado. Los ciudadanos pagamos nuestros impuestos religiosamente para que así sea y es tarea de los políticos de las diferentes administraciones buscar los mecanismos para asegurarnos una atención que nos hemos ganado a pulso y que nos merecemos.

tracking