EDITORIAL
El éxito de la Fira de Titelles
Salas de exposiciones, teatros, calles y plazas abarrotados en Lleida para disfrutar de la magia de las marionetas. La Fira de Titelles ha demostrado en su 34 edición que tiene una salud de hierro. Con su programa ha movilizado a más de 45.000 espectadores a lo largo de tres días, unos niveles de asistencia prepandemia, lo que sus organizadores califican de “éxito absoluto”.
El público ha podido disfrutar en estos tres días de un total de 31 propuestas distintas interpretadas por 29 compañías internacionales. Doce de ellas eran catalanas –cinco de Ponent–, nueve del resto de España y ocho extranjeras. En la misma línea, más de 300 profesionales han hecho posible el certamen, que ha contado con 19 estrenos, una muestra work in progress y cuatro cortos de animación.
Lejos queda aquella primera vez en que por empeño de Julieta Agustí y Joan Andreu Vallvé, Lleida estrenó esta muestra, que con el tiempo y el talento de sus impulsores y de los artistas del sector se ha convertido en todo un referente a nivel internacional. Su importancia no se centra tanto en el número de espectadores, que es vital, no hay que olvidarlo, sino en visibilizar un sector poco mediatizado, sin grandes campañas de promoción y sin una exposición pública constante como lo son los deportes, el cine o el teatro. Y al igual que sucede con la Fira de Teatre de Tàrrega, las Titelles de Lleida dan al espacio público una utilidad colectiva que en el día a día olvidamos y que en las fiestas populares de antaño tenía mucho protagonismo y en los años de encierro obligado por la pandemia valoramos más que nunca.Arte y ruralidad en PenellesOtro de los ejemplos de utilización coral, positiva, enriquecedora y con mucho valor añadido de las calles y plazas de nuestras comarcas es el Gargar de Penelles, un festival de arte urbano con murales pintados en las fachadas de las casas que nació de una iniciativa de un grupo de jóvenes que habían viajado a Río de Janeiro y pensaron en trasladar la idea a este pueblo de la Noguera y que, gracias a la colaboración de Binomic.cat y el consistorio, se ha convertido en pionero en Ponent y el Pirineo.
Historia cotidiana de los personajes más relevantes del mundo rural contemporáneo y sus gentes. Un fenómeno artístico que se ha ido extendiendo a otros municipios, desde Torrefarrera a la misma Lleida, y deja una huella imborrable de cada sector del territorio: desde la agricultura a la cultura, pasando por escritores, deportistas o mitos del cine. Penelles y sus creadores demuestran con el Gargar, sonido que emite la perdiz de secano, que el talento y la perseverancia triunfan y llegan a la gente igual aquí que en la mismísima ciudad brasileña.