El major Trapero pide justicia

El major de los Mossos d’Esquadra, Josep Lluís Trapero, anunció ayer que denunciará ante la Justicia la “persecución injusta” a la que le sometió la brigada política creada por el ministerio del Interior durante el primer Gobierno del PP liderado por Mariano Rajoy. En un comunicado, Trapero reacciona a la investigación conjunta de elDiario.es y La Vanguardia, que ha documentado que el major fue uno de los objetivos de la Operación Catalunya y que la “policía patriótica” le acusó sin prueba alguna de proteger “a la familia Jorodovich en sus temas de tráfico de drogas”. El de Trapero es uno de los nombres de políticos y empresarios que, con base en rumores sin contrastar y falsedades, aparecen en hasta 34 investigaciones de la Dirección Adjunta de la Policía. El major asegura que esta investigación ilegal solo tenía como objetivo su “descrédito y neutralización”. Asimismo, hace hincapié en que el uso de fondos reservados agrava la trama. Otra de las víctimas de las cloacas del Estado ha sido el fiscal de Lleida Martín Rodríguez Sol, que incoó diligencias contra el diario El Mundo por difundir noticias falsas sobre Artur Mas y Jordi Pujol y opinó que la Constitución permitía hacer una consulta en Catalunya. La Fiscalía General le abrió un expediente y este impoluto jurista leridano tuvo que dimitir. La lista y los agraviados son largas y no cabe otra acción que no sea que el Gobierno español llegue hasta el fondo de estas ilegalidades impropias de un estado democrático. Y, por supuesto, que la Justicia actúe de inmediato.En defensa de la ganaderíaLa ganadería y sus productos derivados (carne, leche, huevos) están siendo señalados por varios sectores como un enemigo a combatir para luchar contra el cambio climático y por una ruralidad más sostenible. Para ello, se utilizan datos incompletos, se contrapone el futuro del mundo rural con las denominadas “macrogranjas”, un término ideológico puesto que una explotación de 2.000 cerdos de engorde bajo ningún concepto es grande, y se mezcla todo con enfermedades como cáncer o ictus, consumo de agua, contaminación, antibióticos, etc., con el único fin de criminalizar el sector. El porcino, por centrarnos en el ejemplo que utilizó el martes un documental emitido por TV3, es puntero en Catalunya y España y ha aportado estabilidad económica a muchas familias al complementar con granjas su actividad agrícola. Lleida es también pionera en eliminar deyecciones para restar nitratos del subsuelo y los controles sanitario y de bienestar animal son extremos, como obliga la Administración. Todo puede y debe mejorar, pero el mundo rural no existiría sin los payeses y ganaderos y además ¿qué comeríamos?