No todo vale
La cita es del pastor luterano Martin Niemöller, aunque erróneamente atribuida a Bertolt Brecht: “Cuando los nazis vinieron a buscar a los comunistas, no dije nada, porque yo no era comunista. Cuando vinieron a por los socialistas y los sindicalistas, no dije nada, pues no era ni lo uno ni lo otro. Cuando vinieron a por los judíos, no dije nada, pues yo no era judío. Cuando vinieron a por mí, para ese momento ya no quedaba nadie que pudiera protestar por mí.” O, en versión 2.0, un tuit de ayer del CEO de StartSud Marc Arza, exconseller nacional del PDeCAT: “El calco, fase por fase, del Procés a la española. Ya estamos en el lawfare y empieza el hiperliderazgo. De aquí a pocos días los de Podemos harán una asamblea sobre el apoyo a Pedro Sánchez y empatarán”. Más allá de la ironía, desde Catalunya, el caso judicial construido a partir de recortes de prensa contra Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, suena a déjà vu. ¿Cómo es posible que un juez –en este caso Juan Carlos Peinado, padre de una edil del PP– abra diligencias sin más indicios que las informaciones aportadas por los sindicatos ultras Manos Limpias y Hazte Oír que, para más inri, reconocen que podrían obedecer a fake news? Hace demasiado tiempo que la política se ha judicializado. O, lo que es peor, que la justicia se utiliza para acabar con adversarios políticos. La exvicepresidenta valenciana Mónica Oltra o el exconseller y exalcalde de Barcelona Xavier Trias han sido algunas de las víctimas del lawfare. Ahora le ha llegado el turno a Pedro Sánchez, que mañana decidirá si dimite después de unos días de reflexión. De hecho, hacía tiempo que desde las cloacas del Estado se había encargado “matar políticamente a Sánchez”. La enésima cinta del excomisario Villarejo que sale a la luz refleja que en 2014 el gobierno de Rajoy, a través del exsecretario de Estado de Seguridad Francisco Martínez, encargó a Villarejo espiar al padre de Begoña Gómez. Ayer, miles de personas salieron a la calle en Madrid para dar su apoyo al presidente del Gobierno y el Comité Federal del PSOE mostró su respaldo incondicional a Sánchez, secretario general de los socialistas. Las elecciones catalanas han quedado en un segundo plano ante la incertidumbre de qué pasará si el líder del PSOE finalmente renuncia. Pase lo que pase, los demócratas de aquí y de allí no pueden tolerar que se construyan causas para acabar con los adversarios políticos. No todo vale o no todo debería valer. Una de cal y otra de arenaA las puertas de la celebración del Primero de Mayo, el volumen del paro en Lleida es el más bajo en estas fechas desde 2008. Sin embargo, el 46% de desempleados llevan más de un año buscando trabajo