Del vuelva usted mañana al llame usted mañana
Las restricciones durante la pandemia de la Covid consolidaron y generalizaron el sistema de cita previa en las oficinas de atención al público de las distintas administraciones, que obliga a los usuarios a pedir con antelación un día y hora para poder efectuar el trámite que necesiten. Tras la pandemia, hay servicios que combinan este sistema con la atención sin cita para determinadas gestiones, como es el caso de la Oficina de Atención Ciudadana del ayuntamiento de Lleida. No obstante, en otros esta segunda alternativa no existe o es excepcional y, a tenor de las quejas de los afectados, es lo que sucede en varios departamentos de la administración central en la provincia. El sábado dábamos cuenta de que el Servicio Público de Empleo Estatal no daba el viernes la opción de concertar hora para solicitar la prestación por desempleo, ni tampoco de poder ser atendido por vía telefónica o telemática, mientras que el día antes tan solo ofrecía la posibilidad de acudir a su sede en Vielha. Y hace poco, un centenar de personas migrantes se manifestaron por el centro de Lleida ciudad en protesta porque no tienen manera de conseguir una cita para los trámites que deben hacer en Extranjería o la comisaría de la Policía Nacional para tener al día su documentación. Además, varios de ellos denunciaron que hay personas que se aprovechan de esta situación y han creado un mercado negro de venta de citas previas para estos servicios por importes que pueden oscilar entre los 50 y los 200 euros. Diversos Síndics de Greuges, entre ellos la del ayuntamiento de Lleida, han denunciado que las administraciones abusan de este sistema y que también deben garantizar la vía presencial. El pasado enero, el Gobierno central anunció que modificaría la ley de Procedimiento Administrativo Común para eliminar su obligatoriedad, pero de momento todo sigue igual. Así que, hasta que no haya cambios, podemos decir que, en determinados servicios públicos, el “vuelva usted mañana” que hizo popular en sus artículos Mariano José de Larra hace casi 200 años se ha convertido, en plena era digital, en un “llame usted mañana”.El arte ‘escondido’ en SigenaLa reclamación por parte de Aragón de obras de arte depositadas en el Museu Diocesà de Lleida que procedían de parroquias aragonesas, después de que en 1998 estas se desgajaran del obispado de Lleida y pasaran a depender del de Barbastro, siempre fue una cuestión más política que cultural o de proximidad. Por si alguien tenía alguna duda, la prueba del nueve es que, como explicamos hoy, las obras requisadas en Lleida a finales de 2017, durante la vigencia del 155, que fueron trasladadas al monasterio de Sigena pasarán dos años y medio sin poder ser visitadas por el público.