Más atractivos turísticos
Los atractivos turísticos de las comarcas de Lleida han protagonizado este espacio en innumerables ocasiones, ya sea para alabar proyectos o para reclamar más atención y/o inversión de las administraciones a las iniciativas que surgen de aquí o bien es aquí donde radican. Tiene toda su lógica porque este sector y el agroganadero son los auténticos pilares de la economía de la provincia. Es por ello que hoy queremos presumir, y felicitarnos en conjunto, de tres proyectos que deben servir para añadir nuevos alicientes a la oferta turística. El primero, que ya se ha puesto en marcha, es la tecnología de realidad virtual que la Generalitat acaba de estrenar en el Centre d’Interpretació d’Art Rupestre de El Cogul, que permite entrar en el patrimonio de hace miles de años. Así, el visitante, gracias a las gafas de realidad virtual, puede ser parte de la historia y prácticamente departir con los autores de las pinturas que decoraron la Roca dels Moros hace más de 8.000 años. Se trata de una renovada museografía que, sin olvidar los clásicos plafones, da un espectacular salto tecnológico inmersivo que, a su vez, supone un aliciente más para este interesante espacio histórico y cultural de Les Garrigues que se puso en marcha en 2015, después de algún que otro contratiempo. Este recurso tecnológico se extenderá a otros cuatro puntos patrimoniales de Catalunya: en octubre en Escaladei, en diciembre en el románico de La Vall de Boí y el año que viene en Sant Pere de Rodes y el castillo de Miravet. Siguiendo con proyectos para las comarcas de Lleida, esta pasada semana hemos dado a conocer otros dos, aunque en estado más incipiente, que a buen seguro atraerán a más turistas. Así, informábamos de que el embalse de Rialb tendrá una tirolina de 1,1 kilómetros que enlazará el núcleo de Vilaplana, en La Baronia de Rialb, con el municipio de Tiurana. Con un desnivel de más de 100 metros, se complementará con un catamarán eléctrico que trasladará de nuevo a los usuarios al embarcadero de Vilaplana, conocido como el Grau de Paradís. La obra supondrá una inversión de 200.000 € y, si se cumplen los plazos, está previsto que sea adjudicada a finales de año para que esté operativa en primavera. Y con una temática similar, ya que el agua también es protagonista, ayer dábamos cuenta de que diferentes municipios del Pirineo apoyan una iniciativa para convertir las centrales hidroeléctricas de esta zona en un atractivo turístico. Se trata de un proyecto liderado por Pirineus Watt, una asociación que promociona el patrimonio hidroeléctrico del Pirineo. Se llamará La força de l’aigua, y consistirá en un recorrido turístico para divulgar el valor cultural, paisajístico e industrial de presas, embalses y centrales en el curso de los ríos Segre, Noguera Pallaresa y Noguera Ribagorçana.