PERSONAS Y ORGANIZACIONES
Great Resignation o la Gran Dimisión
El primero en utilizar el citado término fue el psicólogo Anthony Klotz, profesor en la escuela de negocios de la Texas A&M University. Lo hizo para referirse al abandono voluntario del trabajo, “movida” que empezó con la llegada de la pandemia para continuar hoy muy presente y convertirse en un fenómeno que está llevando a que millones de profesionales en todo el mundo, y especialmente en EEUU, hayan decidido dejar voluntariamente sus trabajos sin que ello pueda considerarse un caso de rotación o de incorporación inmediata a otro puesto. Y es que en física es posible prever el comportamiento de los materiales en función de la situación a la que son sometidos, pero, en el caso del ser humano, las consecuencias cuando estos son sometidos a situaciones límite como lo fue el caso de la pandemia pueden provocar unos resultados imprevisibles y distintos como los que ha llevado a muchos empleados a replantearse el futuro y a darle menor peso a la variable empleo en favor de un nuevo estilo de vida personal y familiar.
¿Ha llegado la Gran Dimisión a España? Para que los empleados adopten una decisión tan drástica como dejar su empleo deben darse una serie de aspectos personales y otros situacionales. Entre los primeros cabe señalar: la manera en que cada uno percibe la amenaza, tener una baja posición en el organigrama y la formación. Entre los situacionales, el más significativo sería la facilidad para encontrar un nuevo empleo el día que lo deseen.
En España, con una de las tasas de desempleo más altas entre los países desarrollados, situada por encima del trece por ciento, dicha tasa actúa como un antídoto que impide que los trabajadores realicen su renuncia al empleo. En el otro extremo tenemos a EEUU, en donde varios millones de trabajadores, especialmente en la franja de baja calificación, optaron en el primer semestre de 2022 por dar ese paso –probablemente seguros de que el día que deseen activarse podrán conseguirlo–. Por eso, cuando la ministra de trabajo, Yolanda Díaz, manifestaba estar preocupaba porque el fenómeno de la Gran Dimisión se extendiera a España, los expertos le explicaron que estuviera tranquila, pues, aunque por parte de los trabajadores pudieran existir tales motivaciones, las escasas expectativas que supondría volver a incorporarse al mercado laboral español frenarían la idea de causar baja voluntaria.
Consecuencias de la Gran Dimisión La principal consecuencia dentro del mercado laboral es que hay vacantes que no se cubren. En España se dan las mismas consecuencias, pero por causas distintas. ¿Cuál es la razón por la que en España quedan más de cien mil puestos de trabajo al año sin cubrir? Si suponemos que el mercado laboral es un sistema de fuerzas formado por cuatro vectores: V1 (formación), V2 (demanda de empleo), V3 (oferta de empleo) y V4 (políticas de empleo), la resultante V5 (empleados) es fruto de la acción de las cuatro anteriores.
Y, si observamos dicho mercado laboral, podemos ver que V1 y V3 se comportan como fuerzas que no siempre suman entre sí, lo que lleva a que haya más de tres millones de parados y que la mayoría de estos no estén preparados para las vacantes que pide el mercado laboral actual. Así pues, si queremos generar empleo, debemos seguir formando a nuestros jóvenes, especialmente en las áreas relacionadas con los ciclos formativos.