Los sesgos y el currículum (CV) ciego

Los sesgos en la selección de personal Según el diccionario de la RAE, sesgo es la oblicuidad o torcimiento de una cosa hacia un lado. Dentro del campo de la psicología, la mayor parte de los autores hablan del sesgo cognitivo y señalan que es aquella característica del individuo que provoca una distorsión a la hora de procesar la información, lo que le impide ser objetivo en la valoración de los demás. Por lo tanto, un sesgo cognitivo es un mecanismo del pensamiento que provoca una desviación en el resultado final.

Es importante distinguir entre sesgo y error, pues, aunque en ambos casos se produce una desviación de la realidad, el sesgo implica una distorsión sistemática y obedece a causas internas al individuo que pueden ser provocadas por razones cognitivas o socioculturales, mientras que en el error la desviación es puntual. Así pues, ya tenemos quien es el culpable de que nuestras valoraciones sobre los demás no sean objetivas y que estas vengan influidas por nuestros prejuicios –son los sesgos–. ¿Son los CV ciegos la solución para evitar los sesgos? Hay quien señala que la mejor manera de evitar prejuicios en el reclutamiento profesional es que en el CV se omitan algunos datos que puedan llevar a los reclutadores a cometer dichos prejuicios.

Para ellos, los CV ciegos se enviarían sin incluir la información personal como edad, sexo, nacionalidad o la foto del candidato, incluyendo únicamente las competencias experienciales o hard skills y las académicas o soft skills. Con solo esta información, el reclutador podría establecer un primer juicio sobre la valía de los los profesionales sin dejarse influir por otros aspectos meramente personales. Entre las causas cognitivas que provocan los sesgos, está el procesamiento deficiente de la información que recibimos y entre las socioculturales estarían la cultura, la religión o determinadas dinámicas grupales.

En mi opinión, difícilmente los CV ciegos podrán evitar los sesgos, ya que posteriormente al envío del CV, sea este ciego o no, habrá que citar a los profesionales preseleccionados para una entrevista presencial. Con lo cual, la mejor manera de actuar contra los sesgos y prejuicios es entrar en las causas que los provocan sin necesidad de esconder información curricular. Cómo evitar los sesgos en los procesos de selección El CV ciego en España fue impulsado en el año 2017 por la entonces ministra de igualdad, Dolors Montserrat, quedándose hasta la fecha en un mero intento, ya que los reclutadores desean tener cuanta más información mejor respecto a los aspirantes.

Buscar la máxima objetividad en el reclutamiento no pasa por omitir información en el CV y sí por ser lo más objetivo posible en la valoración. Para desarrollar una mente objetiva debemos evitar el pensamiento rígido, mantener una actitud abierta y positiva, ser flexibles y permeables socialmente, recabar información completa de los evaluados y no solo algunos aspectos sobre su CV, aspecto este último que, de no cumplirlo, estaríamos cayendo en lo que Snyder nos indicaba que debemos evitar: “A la hora de juzgar a otras personas tendemos a recabar solo aquella información que confirme nuestra hipótesis”, sin olvidar que, en la evaluación profesional y en cualquier otro ámbito de valoración, hay formas de pensamiento que debemos controlar como el efecto halo o los estereotipos. No hacerlo nos llevará a que el juicio que emitamos sea sesgado y, por lo tanto, carezca de validez.