Keep Calm!!!

Que no cunda el pánico. Si las cosas se hacen bien y todas las fuerzas visibles convergen juntas, podemos superar el escollo del descenso. Entonemos el “mea culpa” entre todos: el cuerpo técnico porque quizás no ha sabido motivar lo suficiente al equipo en momentos puntuales. Los jugadores porque de manera reiterativa han caido en picado durante los últimos minutos de los partidos, con fallos increíbles. Y la Junta directiva por realizar algún que otro fichaje que no ha salido todo lo bien que se esperaba. Por supuesto, salvo de esta debacle a los patrocinadores del club y a las instituciones, por su aportación económica y, sobre todo, al público, que no ha dejado de asistir al Barris Nord para animar al Força Lleida, aunque últimamente haya habido silbidos de disconformidad por lo ocurrido en el terreno de juego.

Una temporada es como un partido: cuando las cosas salen bien, los tiros entran y los rebotes se cogen. Entonces mejor no tocar nada. Pero cuando todo se tuerce y se entra en una espiral negativa, lo mejor es parar, hablar, tener la cabeza fría y actuar con calma y tranquilidad. El entrenador es quien ha de saber aportar esta dinámica. En él recae la figura del líder y los jugadores le han de creer. Si salvamos la categoría será importante acertar en esta figura y mantener la columna vertebral del equipo, haciendo un esfuerzo para quedarse con jugadores imprescindibles como Ogungbemi y Djukanovic y confeccionar una plantilla fiable para entusiasmar a la afición.

La salvación es posible y para ello hay que luchar cada partido. Quedan encuentros. Vamos a dar plena confianza a jugadores y al Staff técnico. No puede haber relajación, pero tampoco un exceso de presión que conlleve prisas. Y ya se sabe que éstas son malas compañeras de viaje… Keep Calm!!!