El partido más importante

El fútbol es tal vez el deporte en el que hay más “partidos del año”. Aunque no se trate de ninguna final, la apelación al “partido más importante de la temporada” o “es la primera de las diez –o veinte– finales que tenemos por delante”, son habituales en jugadores y técnicos. En el caso del Lleida, esta denominación cuadra perfectamente para el encuentro de la Copa del Rey que debe jugar este miércoles en el campo del Ebro, donde el equipo de Gerard Albadalejo se juega mucho más que pasar una ronda.

Ya lo dijo el propio Albadalejo la pasada temporada, cuando el Lleida afrontaba la tercera ronda. “Es nuestra final de Copa”. Y tiene razón. Es improbable que el Lleida pueda llegar a la final de este torneo, por lo que su máxima aspiración, su “final”, es el partido de la tercera ronda. El motivo es que el premio por pasarla es extraordinario: el ganador se medirá con un equipo de Primera división de los que disputan competición europea.

El miércoles el Lleida juega el partido más importante del año. Tal vez por ello, Albadalejo reservó ayer a varios jugadores habitualmente titulares, como Fernando Cano o Marc Martínez. El Lleida se juega en el campo del Ebro repetir lo que ya vivió la pasada temporada, cuando se midió con la Real Sociedad y después con el Atético, tras eliminar de forma sorprendente al equipo donostiarra.

El Lleida se juega la posibilidad de volver a llenar el Camp d’Esports. Porque no vale la pena engañarse, el público quiere espectáculo de Primera, ya sea en el estadio leridano como en cualquier otro campo. Lo que se vive esta temporada en Huesca, por ejemplo, es una fiesta continua, aunque los resultados, en una categoría tan exigente, no acaben de acompañar. El lado malo de subir a Primera es que pocos se lo toman como un regalo perecedero.

El Lleida llega a este partido invicto. Ha jugado diez encuentros, ocho de Liga y dos de Copa y no ha perdido. El punto de ayer en Badalona le permite seguir en play off y demuestra que el equipo parece que va por el buen camino.