Pintura y perímetro

Una jornada más y van tres de LEB Oro para un Força Lleida cada vez más rodado y con las piezas más engrasadas. Después de una pretemporada irregular y decepcionante, el entrenador está en camino de buscar la fórmula para jugar de tú a tú ante los rivales y llegar al final del partido ajustados con la mente suficientemente clara y el corazón latiendo como para tratar de barrer para casa.

El baloncesto es un juego de equipo con los roles muy bien definidos y en el que las alternativas tácticas de ataque y defensa se combinan de modo que el resultado es fruto de un puñado de variables donde dos palabras mandan por encima de todo: pintura y perímetro. Pintura porque los pívots son determinantes para el rebote y las segundas posesiones y el perímetro porque sin unos buenos tiradores y un alto porcentaje de acierto difícilmente se gana un partido.

Estamos hablando de dos vasos comunicantes que deben funcionar como un reloj suizo. Y si bien en la pintura Shaquille Cleare y Stutz están en una gran forma, y además bien acompañados por Martí y Mbaye, en el perímetro tenemos que mejorar los porcentajes y las prestaciones. El americano y el bahameño tienen que dar un paso adelante del mismo modo que lo han hecho Sans y el canterano Lafuente, sin duda una de las mejores noticias de este comienzo de Liga.

Los primeros partidos se han jugado con equipos de nuestra Liga y será el próximo viernes cuando tendremos enfrente la primera asignatura difícil de aprobar con la visita de un complicado Oviedo, que es un firme candidato a jugar los play offs. La derrota de ayer en Castellón no debe hacernos nublar la vista. Con trabajo y unión de vestuario llegarán más victorias. Recordemos... pintura y perímetro.