LA CONTRACRÓNICA
El tour del sur
No se podía empezar mejor el viaje por las tierras del sur, que tiene que llevar al Força Lleida a visitar dos comunidades autónomas –Murcia y Andalucía– para enfrentarse a dos equipos con diferente potencial como son murcianos y granadinos. La primera de las paradas fue ayer noche en el pabellón del Real Murcia Baloncesto, ante uno de los equipos más flojos del grupo B de la LEB Oro, siendo el peor valorado y el que menos anota.
En esta Liga de los despropósitos, con jornadas intersemanales, pruebas PCR a tutiplén, aplazamientos y movimientos en la plantilla motivados por situaciones personales, se debe añadir el hecho de que el público no puede acompañar al equipo en sus partidos, convirtiendo la competición en un embrollo de horarios inverosímiles a prueba del mejor de los rompecabezas.
Aranzana ha conseguido un bloque homogéneo con rotación completa tanto en la pintura como en el perímetro y tan solo la falta de precisión en los lanzamientos de triples y tiros libres –ayer fue un esperpento– hace que las victorias no sean más numerosas. El equilibrio en los cuarenta minutos sin bajadas de tensión es el objetivo del coach. Pero los jugadores tienen que mejorar ostensiblemente en sus lanzamientos
La llegada de Michael Carrera, que ayer estuvo muy cerca de un doble-doble, y la formidable actuación de Buchanan, amo y señor de la pintura, fueron determinantes para superar a un Real Murcia impotente y candidato a las posiciones de cola. Con un Miki Feliu apático y un Marcus Vinicius ausente, el resto no sobresalió y rozó la indiferencia. Veremos qué da de sí el equipo con la incorporación de Kendal Manuel en sustitución de Fernando Sierra. Lo mejor de ayer, el resultado, y el martes, a Granada.