Dosis de refuerzo

Primer partido de la temporada oficial y primera derrota del ICG Força Lleida. Expuesto de esta forma puede parecer que la visita al WiZink Center de Madrid para enfrentarse al Movistar Estudiantes haya sido del todo negativa, y no es así. Muy pocos habían apostado por el equipo de Gerard Encuentra ante el máximo favorito para subir a la Liga ACB, y la mayoría habían descontado esta derrota. Es más, se ha ganado una jornada de rodaje para hacer probaturas frente a un coloso de la categoría que rozó la perfección.

Un proyecto nuevo, con entrenador nuevo y una plantilla prácticamente nueva –solo continúa Carrera del año pasado– requiere de un tiempo para construirse y paciencia por parte de la directiva y de la afición para consolidar una trayectoria positiva e ilusionante. Ayer en Madrid vimos las potencialidades y debilidades de un equipo hecho a base de rebajas y al el que le queda todavía un par de retoques –un francotirador y un pívot sólido– para poder tutear al resto de equipos de la mitad de la tabla hacia arriba de la clasificación.

El próximo miércoles ante el Alicante tendremos la oportunidad de ver en directo este conjunto y deseamos que la lesión de Hughes sea leve y le permita volver a las pistas lo más pronto posible. No hay nada más pernicioso que encadenar lesiones y bajas en un equipo que ya va justo de efectivos. Las rotaciones son muy valiosas en un partido de cuatro cuartos y ayer ante Estudiantes, con un banquillo inagotable (12 fichas, y con Dos Anjos, su techo, lesionado), se notó en el último tramo del partido. Al ICG Força Lleida le falta una tercera dosis de refuerzo para estar debidamente cubierto ante la enfermedad del descenso. Necesitamos refuerzos urgentes.