LA CONTRACRÓNICA
Faltas técnicas
Si por alguna circunstancia del juego coral se distingue el Força Lleida en las últimas temporadas y, especialmente en esta, es por la reiterada colección de faltas técnicas que le son señaladas por parte de los árbitros a lo largo y ancho de la competición. La falta técnica es una norma especialmente diseñada para cortar de forma radical las continuas protestas o falta de consideración de jugadores y entrenadores hacia los árbitros. A veces, pueden incluso ayudar a romper el ritmo del contrario o levantar la presión en la grada para darle la vuelta a un partido que se haya puesto muy cuesta abajo.
Bien entendidas y ejecutadas pueden ser tácticamente positivas, pero este no es el caso del Força Lleida, que abusa sistemáticamente de esta faceta del juego encrespando al colectivo arbitral y perjudicando de forma notable en el marcador. Ni Gerard Encuentra ni el MVP Michael Carrera acaban de entender el valor de la protesta y la falta técnica en positivo. Los árbitros nos han etiquetado como equipo protesta y debemos actuar con mayor inteligencia emocional si queremos aspirar a algo más que el play off.
Antes de cada acción de protesta y gesticulación, a pesar del acaloramiento del momento, hay que pensar si esta nos aporta algo positivo o si podemos revertir la situación.