El tiempo

Las personas tenemos la necesidad de relacionarnos, establecer vínculos que permitan desarrollar las capacidades sociales para comunicarnos afectivamente. En el contexto del deporte, y en concreto en deportes de equipo como el baloncesto, se vuelve un aspecto de importancia crítica a la hora de alcanzar el éxito. No obstante, desde mi punto de vista, quizás la clave para establecer estos vínculos se encuentra en el factor tiempo. Tiempo para conocerse y compartir experiencias, tanto en la pista como fuera de ella. Esta temporada, ante la entrada y salida de varios jugadores sumadas a las lesiones, el Força Lleida se encuentra en una situación compleja. Sin embargo, ayer en Alicante, el equipo demostró que la ilusión sigue viva. En cualquier proceso de confección de una plantilla nos enfrentamos a distintas fases; siendo la fase de formación inicial la más larga y compleja, donde tanto los jugadores como el cuerpo técnico deben establecer las primeras interacciones y cada uno debe entender el papel que se le asigna para así poder encontrar un lugar y empezar a construir los fundamentos de la temporada. En esta fase, es vital la comunicación y el respeto mutuo para lograr un grupo comprometido, que luche por objetivos comunes. Hasta la fecha, el equipo ha demostrado buenas dinámicas y momentos de juego muy ambiciosos, pero falta coger solidez, y permitidme volver a mencionar el tiempo como factor clave. Tras dos magníficas temporadas, donde hemos podido soñar alto, hay que seguir confiando, ya que estoy convencido que la fase de consolidación está a la vuelta de la esquina y el simple hecho de conseguir dos victorias consecutivas en una liga tan equilibrada, te sitúa un año más en posiciones privilegiadas.