LA TALAIA
La Braunes Haus
Hace poco tiempo visité un nuevo museo de Munich. Se trata del Centro de Documentación del Nazismo (inaugurado en el 2015). Este museo y centro de documentación está situado en el mismo lugar|sitio donde tuvo la sede central el partido nazi de Hitler, el NSDAP, de 1930 en 1945. La casa, el antiguo palacio Barlow, era conocida en aquel tiempo como Braunes Haus (casa marrón), debido al color de las camisas de sus afiliados. Este centro fue inaugurado precisamente el 30 de abril de 2015, cuando se celebraban exactamente 70 años de la entrada de las tropas americanas en Munich. Estuvo precisamente en Munich donde nació el partido nazi al principio de los años 20 y el mismo Hitler la declaró posteriormente capital del movimiento. Cuando los nazis cogieron el poder construyeron la mayoría de edificios gubernamentales y el Templo del Honor al lado de la Braunes Haus.
El museo tiene la voluntad de ajustar las cuentas con la historia nazi de la ciudad. Por eso, explica de manera detallada cómo el movimiento nazi consiguió ganar terreno entre la población a través del populismo, el racismo, el aprovechamiento del malestar social y económico y la manipulación informativa. En resumen, toda una serie de aspectos y actitudes de las cuales no carecemos últimamente en toda Europa y evidentemente tampoco en España. La exposición temporal que hay al centro ahora es muy ilustrativa en este sentido. Bajo el título: Nie wieder. Schon wieder. Immer noch. Rechtsextremismus in Deutschland seit 1945 (Nunca más. Otra vez. Todavía. Lo extrema derecha en Alemania desde 1945) dan un repaso hasta hoy día de los movimientos neonazis y los partidos de extrema derecha que hay en Alemania.
Una reflexión que denuncia como algunos movimientos y partidos políticos utilizan nuevamente el malestar generalizado que hay a la sociedad, para volver a un discurso de rechazo al extranjero|en el extranjero y en el que piensa o actúa diferente. Glorificando, por otra parte, la gran nación alemana y sus valores. Como se puede ver en Alemania, y precisamente la cuna de este movimiento, se lucha contra este radicalismo de derechas. Aquí, en España, en cambio, Otra vez. Todavía –cómo dice la exposición–, se mira hacia otro lado cuando se habla de este tema. O lo que es peor, se niega la existencia.