LIDERATGE
Emprender o escribir, dos proyectos de vida
Un escritor muy conocido, en una conferencia a la que tuve el privilegio de asistir, dijo que el escritor es el líder de un equipo. Él tiene la idea, la plasma en un manuscrito y luego un equipo de correctores y maquetadores dará forma definitiva al texto. Una vez “terminado” ese texto, la editorial y las agencias distribuidoras formarán, a su vez, parte de un equipo que dará la publicidad necesaria a la obra.
Como escritor, no puedo, ni deseo, exponer nada sobre aquello de lo que no entiendo, pero sí puedo darte una propuesta o dos sobre las similitudes entre escribir libros, publicarlos y comercializarlos y crear empresa, liderar un proyecto, formar o dirigir equipos humanos.Es muy importante, en mi opinión, planificar, lo cual supone prever todas las posibles situaciones que puedan darse cuando el proyecto se inicie y, creo que aún más importante, formar el grupo, el equipo que deberá plasmar tu idea en datos tangibles. Será cuando nuestra creación deba comenzar a moverse y actuar cuando vendrá el momento de ver si aquello que pensamos que sucedería realmente ocurre; veremos si aquellas previsiones que hicimos, nosotros en solitario o en equipo, se cumplen o necesariamente debemos modificar nuestros objetivos iniciales.Es todo aquello no previsto lo que realmente te ayudará a mejorar, corregir y perfeccionar tu proyecto. Si hemos tenido el acierto de prever todas o buena parte de las posibles contingencias de la empresa que vamos a poner en marcha, recibiremos la satisfacción de haber hecho bien nuestro trabajo de planificación, pero es aquello que no hayas previsto, amigo, lo que verdaderamente va a darte la lección que necesitas.En cualquier proyecto que hayas ideado, sea del tipo que sea, mejor en equipo que en solitario, compartiendo e intercambiando ideas y siempre transmitiendo tu pasión, con humildad y sin perder el afán de aprendizaje de todo y de todos.Liderar supone dirigir y coordinar, sugerir, proponer, convencer y decidir.
Asume que formas parte de un equipo, que cada persona que lo forma tiene su propio cerebro, su propia idea del proyecto, o de la parte de este que le haya sido encomendada, y siempre, siempre, cada uno va a pensar que su idea es la mejor y tratará de imponerla sobre las demás cuando estas interfieran con la suya propia. Ahí está tu trabajo, si de verdad eres el líder: es el momento de coordinar y evitar, para la mayor eficiencia, que unas propuestas se solapen con otras. Para ello deberás definir con mucha concreción las distintas parcelas de trabajo, y si además logras que todo el equipo termine por aceptar como bueno tu trabajo habrás consolidado tu liderazgo.Eso tienen en común ambos proyectos, tanto los que comportan escribir libros como los de crear y consolidar tu empresa, y ambos son proyectos de vida.