LIDERATGE
Los equipos pequeños casi siempre ganan
Todos sabemos que los equipos pequeños típicamente son más ágiles, más flexibles y adaptables sobre todo para tomar decisiones más rápido y tomar acción de una forma más eficiente y ágil que los grandes equipos. Esto puede ser muy importante en los entornos tan complejos y volátiles de hoy en día, y sobre todo me refiero a la ley de Metcalfe y la estructura de la mente humana. La ley de Metcalfe dice que por cada tiempo que tú añades a un nuevo usuario o una red el número de conexiones se incrementa al cuadrado del número de usuarios.
La estructura de nuestra mente es la que no puede realmente manejar gran número de relaciones. Los científicos como Robin Dunbar también nos han dicho desde hace décadas que aproximadamente solamente 5 personas pueden tener una relación eficiente e íntimamente unida y conectada para una gestión eficaz y brillante.Es por ello por lo que la mayor parte de las compañías exitosas están estructurando sus equipos en redes de sus equipos pequeños mucho más allá de las pirámides jerárquicas. Estas redes no tienen mandos intermedios.Pero la ley de Metcalfe muestra que, cuando no hay gestores o managers, los equipos deben ser lo suficientemente pequeños para que los miembros no se sobrecarguen en comunicaciones e información superflua que les aleje del foco de éxito, y esa es la única vía por lo que nuestras mentes pueden realmente manejarlo de una forma eficiente.Es por eso por lo que los equipos de deportes ganadores realmente no son mayores de 15 personas, y es la razón por la que las compañías asocian el valor de los equipos pequeños, ágiles y autónomos, fuera de las jerarquías y se gestionan para redefinir las industrias y convertirse en líderes de las compañías de mayor éxito en el mundo.
Es por eso por lo que un equipo pequeño rápido puede golpear y ser mucho más eficiente que un equipo grande y lento en cualquier momento, orientado al foco del éxito sin tantas distracciones e ineficiencias o desperdicios que comportan los grandes equipos de más de 15 miembros. Las consecuencias de la ley de Metcalfe para equipos grandes con la introducción de tecnología serían las siguientes:Disminución del tiempo real de trabajo. Un supervisor o un directivo de nivel intermedio trabaja 47 horas a la semana.
De estas, dedica un promedio de 21 horas semanales a las reuniones y 11 para enviar, leer y responder el correo electrónico. Así que el tiempo real de trabajo se reduce a 15 horas semanales. Y eso no es todo, si se deducen los periodos de tiempo de menos de 20 minutos entre las reuniones o mientras se revisan los mails como “tiempo improductivo” – porque es difícil empezar y completar la mayoría de las tareas en menos de 20 minutos–, entonces la realidad es que el tiempo disponible para trabajar sin interrupciones queda reducido a menos de 6,5 horas a la semana.Aumento de interacciones necesarias.
Un reciente estudio de CEB demuestra que al menos un 60% de los empleados tienen que consultar con un mínimo de 10 personas al día para hacer su trabajo y un 30% con al menos 20. El resultado es que las compañías ahora necesitan más tiempo para hacer cosas. Por ejemplo, se necesita un 30% más para finalizar proyectos complejos de IT, un 50% más para contratar a personal y casi un 25% más para firmar contratos con clientes.
Y esto se ha producido únicamente en los últimos cinco años.Mayor Pérdida de tiempo. Algunas de las tecnologías que se emplean hoy en día en los lugares de trabajo incentivan a los trabajadores a perder tiempo y ser improductivos, como la programación de reuniones innecesarias.