SEGRE

Volver a las viejas profesiones

PIMEC JOVES

Joan Teixidó

Joan TeixidóSEGRE

Creado:

Actualizado:

El mundo laboral actual parece regido exclusivamente por todo aquello que rodea las startups, empresas de nueva creación de vertiente tecnológica que a menudo tratan de solucionar problemas diarios –y atraer de rebote la mirada de los inversores. Son perfiles laborales de nueva creación, y nos solemos fijar en ellos porque nos hacen gracia, por la nomenclatura, siempre en inglés por aquello de la globalidad, y porque seguramente aparentan mucho más de lo que son. Analyst, designer, data, application, machine, learning, especialist, engineering, cloud o IT, son conceptos que podemos ir mezclando para crear nuevas profesiones sobre la marcha, o quizás para renombrar viejos trabajos para aparentar ser más modernos. Podemos sumar a esta lista toda la serie de CEO, CDO, CMO, CTO, CÍO, CDO, CSO o CXO y nos saldrá un panorama laboral más bien desolador, impersonal, de aparentar mucho, de gente encantada de haberse conocido.

Pasa que, normalmente, estos perfiles laborales trabajan para dar servicios en empresas y profesionales como por ejemplo carpinteros, electricistas, montadores de gas, panaderos o zapateros. O juristas, o camareros, o gerentes de una tienda de comestibles, o campesinos y agricultores. Y de estos perfiles ya no hablamos tanto. Quizás son más aburridos, porque son viejos, y quizás porque ya no están para tantas historias.

Ahora, dicen, la aparición de la inteligencia artificial podría hacer trontollar la mayoría de los nuevos puestos de trabajo que nombraba al inicio del artículo. ¿Y entonces? Quizás sólo entonces tendremos que volver a mirar con estima las viejas profesiones, estas de las cuales nadie ya habla. Profesiones que, por otra parte, confeccionan todavía una cartografía social, humana y de vida por todo el país. Sin las nuevas profesiones seguramente podríamos seguir viviendo, pero sin las viejas, las que nos dan la vida, quizás todo sería un caos.

tracking