Asentamiento perenne en el Baix Segre

Unas veinte personas en invierno y más de un centenar en verano viven en condiciones insalubres en un campamento de inmigrantes irregulares en un terreno privado de Torres de Segre, siendo el asentamiento más cronificado de las comarcas leridanas, por mantenerse durante todo el año y que ya existe desde hace diez. La situación de este campamento fue denunciada ayer por el director de Càritas Lleida, Ramon Baró, quien instó a la Generalitat a actuar ante la posible existencia de un problema de salud pública. Según Baró, debe ser la administración catalana, desde Bienestar Social y Sanidad, la que actúe para solucionar la situación que viven los inmigrantes que ocupan dicho espacio, con el permiso del dueño.

Según Baró, el asentamiento alberga a hasta 150 personas en verano, la mayoría temporeros que vienen a trabajar en la campaña de la fruta, mientras que en invierno se quedan unos 20 para guardar el sitio. “Viven en condiciones miserables, instalados en contenedores desechados por la empresa en ese terreno”, señaló Baró. Asimismo, alertó de que algunos recogen y venden caracoles, lo que podría conllevar un problema de salud pública, además que algunas personas podrían estar enfermas. Al respecto, el alcalde de Torres de Segre, Josep Ramon Branzuela, afirmó a este diario que el ayuntamiento ya ha denunciado la situación de este asentamiento, pero que no cuenta con los recursos necesarios para dar una solución estable a estas personas y que es la Generalitat la que debe actuar. “Si vamos con la Policía, salen corriendo. Hay que reubicarlos, pero no de cualquier manera”, constató el alcalde.