RELIGIÓN
Más de medio centenar de leridanos han apostatado en los últimos años en la provincia
||Con escrito de renuncia que les impide, por ejemplo, recibir sacramentos o ser enterrados por la Iglesia
Las tres diócesis de las comarcas de Ponent han recibido en los últimos años a más de medio centenar de leridanos decididos a apostatar, es decir, a darse de baja de la fe católica y dejar de pertenecer a la Iglesia. La mayoría de ellos, más de una treintena, lo han hecho en la diócesis de Lleida entre 2012 y el pasado año, un periodo de tiempo en el que la tendencia de la apostasía ha ido a la baja y los casos se han reducido a la mitad. Ocho más convirtieron en firme esta decisión en el obispado de Solsona en solo tres años (entre 2014 y 2016). Por su parte, la diócesis de Urgell no cuenta con un registro de casos, pero fuentes del obispado explicaron que no se trata de una cifra significativa.
Algunos de ellos apostataron porque creyeron en su momento y ahora han dejado de tener fe y otros porque realmente no compartieron nunca la doctrina cristiana. En cualquier caso, todos ellos presentaron un escrito firmado (en internet pueden encontrarse diferentes modelos de solicitud para romper la vinculación con la iglesia católica y pedir la eliminación de sus datos de los registros religiosos) junto a una copia de la partida de bautismo. El último paso es firmar una renuncia a la fe católica que implica no poder casarse por la iglesia ni recibir cualquiera de los otros sacramentos, así como no poder ser padrino de bautizo o ser enterrado por el rito católico. Finalmente, la diócesis comunica el trámite a la parroquia en la que la persona que apostata había sido bautizada para que en la partida conste la decisión.
La mayoría de casos se ha registrado en la diócesis de Lleida, pero han caído a la mitad desde 2012
En España, la apostasía está recogida en la ley Orgánica 7/1980 de Libertad Religiosa, que reconoce el derecho de toda persona a profesar las creencias religiosas que libremente se elijan o no profesar ninguna; a cambiar de confesión o abandonar la que tenía.
Casi el 40% de los catalanes asegura no ser creyente Catalunya es la comunidad autónoma más laica de todo el Estado, presentando las cifras de no creyentes y no practicantes más altas. Así lo constata el informe Laïcitat en xifres. Anàlisi 2016 que hizo público el pasado mes de diciembre la Fundació Ferrer i Guàrdia, una entidad de referencia en el ámbito de la educación y las libertades civiles. Y es que el 39% de los catalanes asegura no ser creyente y más de la mitad de las familias está en contra de la posibilidad de que se pueda solicitar que sus hijos aprendan religión en la escuela. Además, Catalunya es el territorio donde se registran menos matrimonios religiosos (más de un 84% son civiles) y donde nacen más niños fuera del matrimonio, con un 47% en 2014 según datos del Institut d’Estadística de Catalunya Idescat), lo que supone cinco puntos por encima de la media.