CONSUMO
Los leridanos pierden hasta 10 millones al año por no apagar aparatos eléctricos
La función ‘stand by’ de los aparatos eléctricos supone un gasto anual de 30 a 60 euros por hogar, hasta el 12% de la factura || En el conjunto de la provincia podría llegar a los 10 millones al año
¿Consumen los aparatos eléctricos cuando se apagan solo con el mando a distancia? ¿Cuánto gastan si se quedan en esa llamada función de stand by (en espera)? Sí y seguramente mucho más de lo que la mayoría de la población cree son las respuestas a estas dos preguntas. Y es que el conocido como consumo fantasma (aquel que se produce cuando no apagamos del todo los aparatos y estos se quedan permanentemente conectados a la red aunque no los utilicemos) representa entre un 7% y un 12% del total de la factura eléctrica anual de un hogar, lo que supone entre 30 y 60 euros al año (en función del número de dispositivos y de la tarifa eléctrica contratada). Esta cifra podría llegar a los 10 millones de euros sumando el gasto de los 170.000 hogares de la provincia de Lleida. “Es un consumo energético que pensamos que no existe pero que está ahí y que va impactando en la factura, aunque no de forma significativa”, explica Lluís Morer, responsable del programa de eficiencia energética del Institut Català d’Energia. Y con el precio de la electricidad al alza, cualquier posibilidad de ahorro es buena para los hogares. Por eso hay que prestar especial atención a todos aquellos aparatos que han inundado nuestros salones de mandos a distancia como son el televisor, el router, la videoconsola, el aire acondicionado, el decodificador o el home cinema y que cuentan esta función stand by que nos ha hecho la vida más cómoda a la hora de encenderlos y ‘apagarlos’ pero que también nos hacen consumir (una media de 5 vatios) cuando realmente no están funcionando. “Hablamos de aquellos que cuando los ‘apagamos’ se queda una luz encendida o nos muestran continuamente la hora”, apunta Morer. Aunque en menor nivel, también tienen un consumo fantasma algunos microondas, teléfonos inalámbricos, impresoras o cafeteras. También gastan los cargadores que dejamos enchufados, sin el aparato en cuestión o con este totalmente cargado, aunque este caso es tan mínimo (aproximadamente cincuenta céntimos al año) que no llega a ser considerado como consumo fantasma.
En cualquier caso, algunos consejos básicos como pueden ser enchufar estos aparatos a una regleta con interruptor para apagarlos con un solo gesto o tener en cuenta la función stand by a la hora de comprarlos puede permitirnos ahorrar en algunos casos hasta 60 euros anuales. “Todo acaba sumando y son hábitos muy sencillos de poner en práctica en nuestra vida cotidiana y que está bien que todo el mundo los conozca”, asegura Morer. Y eso sin tener en cuenta que, además, contribuimos a reducir la contaminación ya que, como cualquier otro consumo, genera un impacto medioambiental.
algunos consejos
Desconexión total
Cuando se habla de ahorro energético sin duda, el mejor de los consejos, es desconectar los aparatos del todo siempre que esto sea posible.
Regleta de enchufes
Otro de los consejos que dan los expertos en este tema es utilizar una regleta de enchufes con interruptor. De esta forma, podemos tener aquí los aparatos que no tienen que estar encendidos siempre necesariamente y con solo un paso se desconectan totalmente de la corriente.
Temporizador
Una posibilidad más para evitar el llamado consumo fantasma es la utilización de los temporizadores, una especie de programadores. Así, los aparatos se apagarán cuando no los necesites o puedes hacer que se enciendan cuando vayas a llegar a casa, sin necesidad de que estén en marcha todo el tiempo.
El momento de la compra
También es muy útil comprobar los aparatos antes de comprarlos y tener en cuenta el factor del consumo stand by. Si tienen una luz siempre encendida o una pantalla con un reloj permanente será un dispositivo propenso al consumo fantasma.
La cultura del ahorro
Comprar los modelos de electrodomésticos más eficientes o utilizar medidores de consumo también ayudan a controlar el gasto en electricidad.