SALUD ESTUDIO
Dormir menos de 4 horas o más de 10 aumenta el riesgo de sufrir enfermedades del corazón y contraer la gripe
|| En el caso de los niños, tienen más problemas de concentración e hiperactividad
Dormir poco, menos de cuatro horas, pero también dormir demasiado, más de 10, puede afectar a la salud y la calidad de vida. Varios estudios relacionan la cantidad y calidad del sueño con el riesgo de sufrir hipertensión arterial, enfermedades coronarias, cerebrovasculares, obesidad, diabetes tipo 2, depresión o hasta contraer algún resfriado o gripe en la época de la epidemia.
Estas son algunas de las conclusiones del Informe sobre la salut del son. L’impacte del ben dormir en la salut de les persones i de la col·lectivitat, un documento que se presentó ayer en CaixaForum Barcelona y que es fruto del trabajo del Observatori Global del Son, una plataforma impulsada por el Institut de Recerca Biomèdica de Lleida (IRB), la Universitat Internacional de Catalunya y la fundación Ad Salutem Institute for Healthy Sleep.
Los expertos de este estudio aconsejan dormir entre 7 y 8 horas para los adultos para tener una mejor salud y menos riesgo de mortalidad. Durante la infancia, dormir poco se asocia a problemas de concentración, rendimiento escolar, hiperactividad y ansiedad. En adultos, la falta de sueño tiene clara relación con el rendimiento laboral y los accidentes laborales y de tráfico. El 7% de los conductores se han quedado dormidos al volante en alguna ocasión, lo que provoca un 3,6% de los accidentes mortales y un 13% de los que requieren hospitalización, según un estudio hecho en 19 países de la UE que también se incluye en el informe.
Problemas de salud
“Todos los órganos y tejidos del cuerpo necesitan dormir y, si no lo hacen en la cantidad y calidad necesarias, sufren y acaban provocando problemas de salud”, afirmó Ferran Barbé, investigador del IRB Lleida y uno de los autores del estudio. El Observatori Global del Son tiene como objetivo promover el estudio, la investigación, la divulgación y la promoción del sueño saludable. Desde esta plataforma se quiere impulsar un cambio en la percepción social que equipara el hecho de dormir poco a ser una persona valiente y productiva.
Hay que cambiar los hábitos
Ferran Barbé. Investigador del IRBLleida
¿Cómo valoran la calidad del sueño?
Hasta hace poco solo valorábamos la cantidad de horas dormidas. Ahora estudiamos varias dimensiones, como la satisfacción, la eficacia, la regularidad y la continuidad. Lo hacemos a través de una encuesta cuyos resultados se han incluido por primera vez en la Encuesta de Salud Pública de Catalunya de 2015.
¿Antes no interesaba?
La sociedad es muy consciente de que para tener buena salud hay que seguir una dieta equilibrada, practicar deporte, evitar el tabaco y el alcohol... Pero nadie da importancia al hecho que el sueño también es un factor de salud. Es una percepción social que hay que cambiar.
¿Es importante la reforma horaria para lograrlo?
Mucho. Impactaría positivamente en el rendimiento escolar, en la vida familiar, hasta en los accidentes. Todo cambio de hábitos cuesta, pero hay que trabajar en esta dirección.