'Cursa de llits' en pleno auge

La ‘Cursa de llits’, la disparatada carrera de andróminas que toma las riendas del Carnaval de Lleida cada domingo después de la Gran Rúa, llegó ayer a su 14 edición con más participación que nunca. En total, la carrera sumó 19 camas y más de 150 personas, la mayoría grupos de amigos, jóvenes y niños de varios esplais de la ciudad. Todos ellos tuvieron que diseñar una cama con ruedas para bajar a toda velocidad desde la plaza Sant Josep por las calles La Palma y Almodí Vell para pasar por delante de la Catedral, la Paeria y acabar en la plaza Sant Joan y superar además una serie de alocadas pruebas. De modo que la originalidad no bastó. La audacia y la destreza en la conducción tuvieron que sumarse a la agilidad y rapidez de los participantes. Entre las pruebas, destacó un radar ubicado en la calle Major con cámara incorporada. Cada equipo debía sacarse una foto lo más original posible. Como requisito extra este año, todos tenían que llevar una barra de pan y una sardina.

Los Castellers de Lleida recuperaron la ‘Cursa de llits’ hace 14 años y desde entonces son los organizadores. Su presidente, Joan Ramon Castro, valoró la prueba de forma muy positiva y destactó la amplia participación y el nivel de las creaciones. “Cada año hay más camas y más participantes por cama, algunas sumaban hasta diez personas”, explicó. El jurado eligió como cama ganadora la titulada Alicia en el país de las maravillas, obra de la Germandat de Pau Pi. Sus creadores se llevaron de premio un fin de semana turístico.

La fiesta siguió al mediodía en la plaza Sant Joan con un baile de vermut a cargo de Alea Quartet, lo que cerró un fin de semana tocado por la disbauxa. El Carnaval morirá el miércoles junto a Pau Pi, cuando se celebrará el ‘Enterro de la sardina’ delante del derruido edificio de Magisteri.