Troballes pide colaboración ciudadana para doblar la recogida de ropa usada

Troballes, empresa de inserción laboral que depende de la Fundació Jaume Rubió i Rubió de Càritas Diocesana de Lleida, se ha marcado como objetivo doblar la recogida de ropa de segunda mano en los próximos años para seguir brindando oportunidades laborales a personas en riesgo de exclusión. El año pasado Troballes recogió 550 toneladas de ropa usada, lo que equivale a 1,85 kilos de ropa por habitante y año en su zona de actuación (el obispado de Lleida) y su objetivo es llegar a los 4 kilos de ropa por habitante y año. Así lo explicó este jueves Ramon Baró, director de Càritas Diocesana de Lleida y presidente de la Fundació Jaume Rubió i Rubió, durante la presentación de la memoria anual de la entidad.

Rubió puntualizó que la marca Troballes se reinventará durante el próximo mes, cuando empezará a funcionar una alianza entre 25 Cáritas de todo el Estado con proyectos de ropa usada para crear la marca única “RE-” y crear economía de escala. Será entonces, según Baró, cuando en Lleida abrirán una tienda nueva en Pardinyes (la sexta) que ya incorporará esta nueva imagen.

En cuanto a los datos del año pasado, la Fundació Jaume Rubió i Rubió contrató a 16 personas en riesgo de exclusión social. Josep Fernández, gerente de Troballes, destacó que en 2016 se batió un récord de venta de piezas de ropa en las tiendas, con un valor total de 380.000 euros, un 12% más que el año anterior.

A pesar de ello, la fundación cerró el 2016 con un balance de cuentas negativo y un déficit de 31.967 euros. Según Baró, es el segundo año que la fundación cierra en números rojos, debido en parte a la caída de las subvenciones. “La previsión es volver a los números verdes este 2017”, concluyó.