FIESTAS
La Festa de Moros i Cristians estrena sus marchas en un pregón-concierto en el Auditorio
El diputado Josep Maria Forné hace un paralelismo entre la historia de la fiesta y la situación política catalana en su discurso
Más de la mitad del auditorio Enric Granados se llenó este domingo por la mañana de Moros i Cristians y otros leridanos amantes de la fiesta y de la música para escuchar el primer pregón musicado de la historia de la asociación. La banda sinfónica Unió Musical de Lleida, con 90 músicos, tocó bajo la dirección de Esteve Espinosa diez marchas, las que marcarán el paso de las comparsas moras y cristianas el próximo 21 de mayo por las calles de Lleida y la lucha final en la Seu Vella.
Entre el público, el compositor leridano Antoni Serra Oribe escuchaba atentamente y emocionado la interpretación de sus obras Gardeny Templer (marcha cristiana) y Medina Larida (marcha mora) que ha compuesto expresamente para esta edición de Moros i Cristians. En un momento de la marcha mora, el público del patio de butacas se levantó, cruzó los brazos en posición de desfile y se balancearon al ritmo de la Unió Musical produciéndose así uno de los momentos más mágicos del concierto.
Previo a la actuación, el pregonero de la fiesta, el diputado leridano Josep Maria Forné centró su discurso en un paralelismo entre la historia de luchas y cambios de la fiesta y la situación política actual de Catalunya. "Vosotros hacéis que cada año gane un bando, moros o cristianos. Habéis conseguido integrar hombres y mujeres en un plan de igualdad en vuestras comparsas. Así pues, la competitividad ya no es un objetivo, sino que vuestro objetivo es la alegría de la fiesta", dijo Forné. El que fue también director de los servicios territoriales de Benestar en Lleida añadió que espera que entre Catalunya y Espanya "los conflictos se resuelvan también de manera que todo el mundo gane. Llegando a un consenso, que es lo que facilita la democracia, amparado en la voz ciudadana".
El presidente de la asociación de Moros i Cristians, Josep Lluís Gázquez, hizo entrega a Uribe, Forné y Espinosa de una distinción en agradecimiento de su contribución al acto y cerró el concierto con el tradicional grito de guerra de la fiesta: "¡Por la fiesta de Moros i Cristians!" a lo que el auditorio respondió al unísono con un "¡Siempre!".