Escaparates del mundo rural

Más de cuatro mil personas acudieron el pasado fin de semana a tres ferias en la comarcas de Lleida que compartían objetivos similares: dar a conocer sus productos locales y los valores naturales, históricos y culturales de su propio entorno. Así, Bellcaire d’Urgell estrenó su nuevo certamen Firabell, que atrajo a unos dos mil visitantes a lo largo de la jornada, una cifra que anima a los organizadores a repetirlo el próximo año. Esterri de Cardós acogió la sexta edición de la Fira dels productes del Parc Natural de l’Alt Pirineu i de la ovella aranesa, que recibió a un millar de personas; mientras que Vallbona de les Monges puso fin a la cuarta Vallbonatura, iniciada el pasado sábado y con otro millar de asistentes.

Firabell reunió a más de sesenta expositores, de los que una treintena estaban dedicados a productos alimentarios de proximidad y a dar a conocer entidades y empresas locales. El alcalde, Jaume Montfort, destacó la buena respuesta del público y la colaboración vecinal para organizar el certamen. “En próximas ediciones queremos dar más protagonismo a la agricultura y la ganadería ecológica”, explicó. El recinto acogió una exposición de tractores y maquinaria agrícola antigua.

La buena respuesta del público anima a Bellcaire a dar continuidad a Firabell en los próximos años

Por su parte, la Fira del Parc de l’Alt Pirineu atrajo a una treintena de expositores de productos artesanales en el pueblo de Arrós de Cardós. A los del propio parque, se sumaron por primera vez este año algunos procedentes de la región francesa de l’Ariège. Incluyó un concurso de esquilado de ovejas, una comida popular y demostraciones de ‘gossos d’atura’ que conducían ocas en lugar de un rebaño ovino.

Finalmente, Vallbonatura completó su programa de actividades con una salida para dar a conocer el territorio, una ruta de BTT, una sesión de anillamiento de aves y otra de maridaje de vinos tras la feria de artesanía del pasado sábado (ver SEGRE de este domingo).