PATRIMONIO
Ivars d'Urgell vuelve a dar la hora
Dos vecinos recuperan el reloj del campanario de la localidad, que llevaba más de 20 años sin funcionar || Durante un año y medio han desmontado, limpiado y engrasado la maquinaria
Los habitantes de Ivars d’Urgell ya no tienen excusa para no ser puntuales. Y es que el reloj del campanario, que llevaba más de 20 años parado, ha vuelto a funcionar gracias a la iniciativa de dos vecinos, Jaume Espart, del núcleo de Vallverd, y Ramon Solé, de la pastelería Forn Cal Gil.
Ambos forman parte de la asociación Ivarseja, que agrupa al comercio local y que ya llevaba tiempo planteando la posibilidad de recuperar cosas para el muncipio. “Ramon, que tiene el establecimiento al lado del campanario, comentó que le haría gracia arreglar el reloj y yo me ofrecí con la condición de que no se pusiera una fecha límite y que no pasaría nada si se estropeaba definitivamente”, explica Jaume, que se dedica a la elaboración de conservas, pero que había trabajado en el mundo de la electromecánica.
Con el beneplácito del cura y el ayuntamiento, en enero de 2016 empezaron a desmontar las piezas, no sin tener que hacer frente a problemas como un gran enjambre de abejas. Por un lado, el mecanismo interno para dar cuerda y por el otro, el exterior de las agujas. “Subir hasta este último ha sido difícil porque había que acceder por un agujero estrecho hasta la bóveda y luego al tejado”, recuerda Jaume, que se llevó a casa todas las piezas.
Durante este casi año y medio han limpiado y engrasado la maquinaria, tareas que han permitido que el reloj marque de nuevo la hora desde el 20 de mayo. Ahora, cada 10 o 12 días, uno u otro acuden a darle cuerda. Su próximo reto es instalar un motor para que esta acción sea mecánica, pero no dejararán de trabajar para recuperar cosas para Ivars, que mañana sábado abre su Festa Major.