Más juventud comprometida

El próximo sábado se conmemora el Día Internacional de la Juventud y uno de los objetivos de esa jornada es fomentar y divulgar la labor social que hacen los jóvenes desde ámbitos como el voluntariado. Al respecto, Creu Roja Joventut quiere celebrar este día haciendo balance de las actividades que han llevado a cabo en los seis primeros meses del año con actividades destinadas a niños y jóvenes, con más de 300 voluntarios de la entidad en las comarcas de Lleida.

Se trata de jóvenes de entre 16 a 30 años que combinan trabajo y estudios con las labores de voluntariado en Creu Roja Joventut, la mayoría destinadas a los casals de verano, las rutas informativas sobre el consumo de alcohol y drogas o el refuerzo escolar.

Campañas de prevención ante el consumo de drogas y los ‘casals’ de verano para niños, los puntos fuertes

Según la entidad, el número de voluntarios disminuyó progresivamente en Ponent entre los años 2013 y 2016. Pero en la primera mitad de 2017, el número de voluntarios ha repuntado y ha aumentado ya un 10% respecto al año anterior.

Sin embargo, las cifras siguen siendo bajas por lo que la entidad hace un llamamiento para que los jóvenes se unan al voluntariado y poder dar más duración a los proyectos. Durante el verano, Creu Roja Juventut atiende a una cuarentena de niños y niñas en actividades de ocio.

Las propuestas van desde las colonias hasta manualidades, excursiones o talleres de todo tipo que fomentan valores y hábitos saludables a la vez que ayudan a los más pequeños a pasar un verano divertido. Los programas de Creu Roja Juventut están diseñados para responder íntegramente a las necesidades de los niños, adolescentes y jóvenes.

También desarrolla campañas de prevención y sensibilización en diferentes ámbitos como la educación para la salud, la igualdad, la cooperación internacional, la sostenibilidad ambiental y la inclusión social.

En primera persona

Núria Cabiscol, Cruz Roja Juventut Lleida:

«Cada vez hay más voluntarios porque los jóvenes quieren estar implicados»

¿Desde cuándo es voluntaria de Creu Roja Joventut?

Me hice voluntaria en 2010 y desde este año también soy directora provincial de Creu Roja Joventut Lleida.

¿Por qué se hizo voluntaria?

Un día vi un cartel en el instituto y con unas amigas fuimos a preguntar. Empezamos yendo los sábados y poco a poco me fue enganchando. Me inicié en diferentes proyectos y cada vez estaba más involucrada.

¿Qué le aporta esta labor?

Contribuyo a la sociedad aportando pequeños granos de arena. No es de forma global. Simplemente me gusta que con mi ayuda alguien reciba felicidad.

¿Faltan voluntarios en las comarcas leridanas?

Cada vez hay más y esto demuestra que la juventud está implicada y quiere estar presente en los cambios que sufre la sociedad. Sin embargo, se necesita más gente si queremos que los proyectos tengan más duración y puedan ser más completos.

¿En qué proyectos colaboran los jóvenes voluntarios?

Los puntos fuertes del verano son las actividades de los casals de verano y el proyecto Somni, que consiste en ir a zonas de ocio nocturno de toda la provincia, como discotecas o fiestas mayores, para dar información imparcial sobre el consumo de drogas. Aplicamos el concepto de propia decisión. En invierno, destaca la recogida de juguetes para los niños más vulnerables, un trabajo que empezamos en septiembre y dura hasta el mes de febrero.

¿Se consolidan valores entre los niños y jóvenes de Ponent?

Entre los proyectos también tenemos actividades y programas que fomentan los hábitos saludables y la convivencia, por ejemplo. Ayudamos a quien lo necesita.

Taller de arte intergeneracional con una veintena de participantes Una veintena de niños y abuelos compartieron este martes un taller de arte en el patio del colegio Santa Maria de Gardeny de Lleida. La actividad forma parte de la Casal d’Estiu de Creu Roja Joventut, que durante los meses de julio y agosto ha atendido a 40 menores en actividades de ocio. Los mayores quisieron transmitir así sus conocimientos a los más pequeños a través de los dibujos. Una iniciativa que se llevó a cabo por primera vez y no se descarta repetir de cara al año que viene ante el éxito de participación. El taller promueve que niños y niñas de 3 a 13 años se relacionen y contribuyan, además, a un envejecimiento activo de la población.