El 65% de los trabajadores es requerido por la empresa fuera del horario laboral
Puede causar estrés, insomnio, dificultades para conciliar trabajo y familia o el síndrome de agotamiento profesional
El 65% de los trabajadores españoles es requerido por su empresa fuera de su horario laboral mientras que entre los directivos la cifra sube hasta el 90%, según se desprende de un estudio elaborado por la empresa Edenred y la consultoría Ipsos. Recibir correos electrónicos de trabajo en horas intempestivas, en fines de semana o en días de fiesta es más fácil en la sociedad hiperconectada en que vivimos actualmente. Los expertos coinciden en señalar que estas prácticas en algunos casos pueden causar estrés, insomnio, dificultades para conciliar trabajo y familia o el síndrome de agotamiento profesional (burnout), pero hay discrepancias sobre si hacer una ley que regule la desconexión digital, como ha hecho Francia, es la mejor solución.
Desde el 1 de enero del 2017, la ley El Kohmri, bautizada así por el apellido de la ministra de Trabajo que la promovió, a Myriam El Kohmri, impone a las empresas francesas de más de 50 trabajadores que tengan que negociar las condiciones para que sus empleados no se vean obligados a responder el teléfono o correos y mensajes electrónicos fuera de las horas de trabajo. La norma se establece como un derecho y no como una obligación, de manera que en ningún caso prohíbe el uso de estas herramientas digitales fuera del horario de trabajo, pero sí que protege a los trabajadores que quieran ejercer el derecho a no utilizarlas una vez han terminado.
Según un estudio de la consultoría PageGroup sobre el equilibrio entre vida personal y familiar de los asalariados, el 62% de franceses dispone de un instrumento digital proporcionado por la empresa y el 41% cree que eso tiene un efecto negativo para su vida. El 75% reconoce que consulta correos o responde llamadas telefónicas más allá del horario de trabajo y cerca de la mitad afirma que lo hace incluso durante las vacaciones o permisos.
El debate sobre la ley El Kohmri en el Estado
En España, la Secretaría de Estado de Empleo hace tiempo que estudia la posibilidad de una regulación que reconozca el derecho de los trabajadores a la desconexión digital de su empresa. Algunos estudios apuntan que el 65% de trabajadores es requerido fuera de su horario laboral y que el 41% no está satisfecho con el equilibrio entre vida laboral y familiar. Ayuda el hecho que más del 90% de las grandes empresas españolas, las que tienen más de 250 trabajadores, y el 36% de las de menos de 10 trabajadores facilitan a su plantilla el acceso remoto al correo electrónico, a documentos de trabajo y a aplicaciones fuera del trabajo, según la Encuesta sobre el uso de TIC y comercio electrónico en las empresas del Instituto Nacional de Estadística.
La profesora de los Estudios de Economía y Empresa de la UOC y experta en recursos humanos Eva Rimbau explica que regular para evitar ciertos problemas puede generar otros y ve difícil hacer «un traje a medida» para todas las actividades. «Hay trabajos o departamentos dentro de una empresa en que la desconexión no tiene ningún sentido», explica. Considera que sólo las profesiones ligadas a un horario estricto podrían aplicar la medida con facilidad, pero constata que las empresas con horarios fijos y que no permiten la flexibilidad laboral «cada vez son menos». Si el trabajador se distribuye las ocho horas de trabajo según sus necesidades, no tiene sentido obligar a la desconexión digital en ciertos horarios. Por ejemplo, le puede ir bien responder mensajes a las seis de la mañana o de nuevo en diez de la noche, porque eso le permite dedicar horas habitualmente laborables a otras facetas de la vida, como la familia o la formación,» explica.
Para que eso sea posible, Rimbau cree que las dos partes —trabajadores y empresa— tienen que dialogar abiertamente sobre sus necesidades y expectativas. «Tienen que ser unas expectativas razonables. No se puede esperar que los trabajadores estén conectados las 24 horas del día». Según Rimbau, cuando las empresas esperan más de lo que es razonable, es cuando surge la demanda de aumentar los controles como regular la desconexión en ciertos horarios o hacer fichar al personal. La experta explica que «hace falta superar esta tentación del café para todos y buscar soluciones que permitan la flexibilidad para trabajar cuando sea mejor para cada uno».
Por su parte, el profesor colaborador del master universitario de Empleo y Mercado de Trabajo y del posgrado de Coaching: Orientación y Asesoramiento en el Mundo Laboral Manel Fernández Jaria sí que se muestra partidario de poder aplicar en España la norma francesa. «Cualquier medida que mejore el clima psicosocial es aplicable en cualquier empresa y ayuda mucho a mejorar la relación que el trabajador tiene con el lugar donde trabaja», explica. «Hay trabajadores que se tienen que justificar constantemente cuando no quieren hacer horas extras o contestar correos una vez han terminado, porque la empresa interpreta que no eres un buen trabajador», explica. Es por eso que, según Fernández Jaria, sí que hay que regular la desconexión digital.