Estrés en la era del titanosaurio

Un estudio publicado ayer en la revista Scientific Reports por investigadores del Institut Català de Paleontologia Miquel Crusafont (ICP) revela que el estrés afectó la reproducción de los últimos titanosaurios de Europa. La investigación apunta que la competencia entre especies habría sido la causa de los huevos de dinosario patológicos de hace 70 millones de años que se han recuperado en varios yacimientos del sureste de Europa, entre ellos de Els Nerets, en Coll de Nargó.

El estrés sufrido por la población de titanosaurios habría provocado que las hembras retuvieran los huevos durante más tiempo de lo normal, provocando alteraciones en el proceso de formación de la cáscara. Esta investigación ha analizado 450 muestras de huevos patológicos del oogénero Megaloolithus, que asocia al grupo de titanosaurios, dinosaurios hervíboros de cuello y cola largas.

Analiza 450 muestras de huevos de hace 70 millones de años, entre ellos los del yacimiento de Els Nerets

La principal característica de estos huevos anormales es que presentan cáscaras multilaminadas, por lo que tienen diferentes estratos de cáscaras superpuestas. Esta malformación está relacionada con el fenómeno de la distocia, que conlleva la retención de los huevos dentro del oviducto de la hembra durante un periodo de tiempo anormalmente largo. Al respecto, Albert G. Sellés, investigador del Grup de Faunes del Mesozoic del ICP, que encabeza el estudio junto a otros investigadores vinculados al Museu de la Conca Dellà, identifica la clara correlación entre la presencia de estos huevos patológicos y un intenso fenómeno de reemplazamiento faunístico que tuvo lugar en Europa a finales del Cretácico.

Durante millones de años, los titanosaurios fueron el grupo de dinosaurios más abundante y diverso en Europa, hasta la llegada de los hadrosaurios hace unos 70 millones de años. “El incremento de competencia entre especies por los recursos naturales produce alteraciones como un aumento del estrés de las faunas”, explica Sellès. Este estrés se puede expresar de muchas formas, añade el investigador, y una de ellas es la alteración de los ciclos reproductivos. Coll de Nargó tiene algunos de los mejores yacimientos del mundo de huevos y nidos de dinosaurio.