La postverdad llega al Vallverdú

Ganador en dos ocasiones del Joan Fuster en los Octubre de Valencia o del premio de ensayo de Alzira, el filósofo leridano Joan Garcia del Muro fue ayer por fin profeta en su tierra y se llevó el Josep Vallverdú de ensayo, dotado con 9.000 euros, por la obra Good bye, veritat, una reflexión sobre el concepto tan de moda en la actualidad como es la postverdad. El profesor de la Universitat Ramon Llull se mostró “muy orgulloso por ganar en mi ciudad un premio como este, que apuesta por obras de pensamiento y de crítica”. Garcia del Muro reflexiona en la obra ganadora sobre qué es la postverdad y hacia dónde nos puede conducir. El filósofo alertó que “en un mundo en el que se diluye la verdad y, al mismo tiempo, la mentira, nos quedamos sin referencias y se pueden poner en peligro los pilares básicos de la democracia, que tanto nos ha costado conseguir”. El ganador del Vallverdú fue uno de los protagonistas de la velada de concesión de los premios literarios de Lleida, celebrada en un Auditori Enric Granados que registró una de las más bajas asistencias de público que se recuerdan. En una gala presentada por el escritor y periodista Martí Gironell, el barcelonés Carles Morell ganó el premio de poesía Màrius Torres, dotado con 6.000 euros, por un poemario titulado Disponibilitat. Un título mismo que define una obra que, según el autor, habla de “la disponibilidad como un estado mental y de acogida, en el que el poeta no solo habita lengua sino que deja que sea esta la que lo habite”.

La concesión de los premios estuvo precedida por los habituales parlamentos en los que la representante de la Diputación, la vicepresidenta Rosa Pujol, levantó los aplausos del público al referirse a “los tiempos históricos en que vivimos” y “la impotencia que sentimos ante representantes políticos en el exilio y en prisión”. A su lado, el alcalde, Àngel Ros, y la concejal de Cultura, Montse Parra, aguantaron el tipo. Otros fueron menos diplomáticos y dejaron sus butacas. En un tweet, Dolo López (PP) lamentó que la concesión de premios se hubiera convertido en “un acto independentista por parte de la representante de la Diputación” e informó que, “muy a mi pesar, he decidido levantarme y abandonar el acto”. También hizo lo mismo Daniel Rubio (C’s) criticando que Rosa Pujol convirtiera “un acto literario en un míting político”.

Por su parte, Àngel Ros destacó las más de tres décadas de la fiesta que Lleida dedica a las letras catalanas, valoró las actividades del Any Màrius Torres y anunció que en el 2018 la ciudad se prepara para conmemorar efemérides como los centenarios de Pedrolo o de la declaración de la Seu Vella como monumento histórico-artístico, el 125 aniversario de la creación del Museu Diocesà, el 75 de la muerte de Ricard Viñes o los 50 de la Petite Galerie. La velada literaria culminó con el espectáculo Elles, que l’acompanyaren tant, Màrius Torres en femení plural, un montaje audiovisual y con intérpretes y música en directo sobre la figura y obra del poeta a través de la mirada de las mujeres de su vida, desde su madre, Maria Pereña, y su hermana Núria hasta su compañera en el sanatorio de Puig d’Olena, Mercè Figueras.