GASTRONOMÍA CERTAMEN
Promesas leridanas entre fogones
Once jóvenes cocineros participan en el concurso Àngel Moncusí con un plato de conejo y un postre con fruta de Lleida|| Àngel Esteve, del restaurante Cràpula, ganador de esta 29 edición
Once talentos culinarios participaron ayer en la 29 edición del Concurs de Joves Cuiners Àngel Moncusí, uno de los más consolidados en Catalunya y que cada año coorganizan la Federació d’Hostaleria de Lleida y la Escola d’Hoteleria para poner en valor la creatividad de los jóvenes chefs y promocionar la cocina leridana. Después de pasar dos horas entre fogones, Àngel Esteve, del restaurante Cràpula de Lleida, se llevó el primer premio por su terrina de conejo, espinacas, avellana y ‘tupí’, y de postre pera asada con mantequilla noisette y chocolate blanco; mientras que Joan Vidal, estudiante de la Escola d’Hoteleria de Lleida, quedó finalista. Ambos consiguieron conquistar al jurado, que valoró tanto la organización del espacio de trabajo como el sabor de su propuesta culinaria. Y es que, en esta ocasión, los aspirantes tuvieron que preparar un plato con lomo de conejo como ingrediente principal, además de un postre a base de fruta de Lleida. “Para un exalumno de esta escuela que ve a los grandes profesionales de la cocina como ejemplo a seguir, sería una gran satisfacción ganar este concurso” explicaba Esteve, momentos antes de saber que ganaría el título de Jove Cuiner 2018. En el certamen también participaron Jesús Gimena (Can Jubany), Robert Canadell (L’Estel de la Mercè), Ivan Campos (Escola d’Hoteleria de Barcelona), Roger de la Torre (Can Boix de Peramola), Jordi Pané (Cal Xirricló), Santiago Aubach (El Caliu), Raül Terrado (Hotel El Castell de Ciutat), Enric Rossell (Bonum No Rules) y Sergi Aritzeta (Cal Xirricló), ocho de los cuales fueron alumnos de la escuela leridana. Asimismo, el certamen contó con la baja de última hora de Meritxell Florensa, chef del restaurante Carballeira y única aspirante femenina.
Para el secretario general de la Federació d’Hostaleria, Ramon Solsona, “se trata de jóvenes que acaban de comenzar en el mundo de la cocina pero con mucho talento, pues a la larga ocupan las mejores plazas de los restaurantes de Lleida y fuera”, al mismo tiempo que subrayaba la importancia de un concurso que “es una oportunidad para empezar a labrarse una reputación culinaria”.
Los jueces valoran la creatividad, además del sabor, la textura y la cocción del plato
Por la noche se celebró la cena de entrega de premios a cargo de cuatro asociaciones leridanas, en la que se dio a conocer el ganador, que podrá disfrutar de una cena para dos personas en cualquier restaurante del país. Por su parte, el chef finalista Joan Vidal recibió una inscripción a un curso de cocina de una escuela de Barcelona.