Philip Morris dejará de producir cigarrillos y apuesta por el tabaco sin combustión

El gigate de la industria tabacalera Philip Morris, dueña de marcas como Marlboro o Chesterfield, anunció ayer que abandonará el negocio de los cigarrillos. Según informó la empresa, a partir de ahora apostará solo por los productos libres de humo.

Este sistema sin combustión consta de un cilindro con una resistencia eléctrica en su interior que genera un calor de 300 grados centígrados. Con el calor se calienta, sin llegar a quemar, la carga de tabaco, que sería aproximadamente de la mitad de la que lleva un cigarrillo normal. Según Philip Morrir, al evitar la combustión del tabaco se evita liberar la mayor parte de las sustancias altamente cancerígenas.

En este sentido, el pasado 21 de marzo la tabacalera informó de que la fábrica de su afiliada griega Papastratos, ubicada en la localidad de Aspropyrgos, cesaba por completo la producción de cigarrillos. La operación, para reconvertir la industria al tabaco de no combustión, ha contado con una inversión de 300 millones de euros para poder reemplazar las líneas de producción.