SEGRE

SALUD HÁBITOS ALIMENTARIOS

El mito de las 'dietas milagro'

Métodos de adelgazamiento como los zumos ‘detox’ prometen perder peso de forma rápida, aunque pueden generar efectos adversos para el organismo y provocar riesgos para la salud ||Los expertos apuestan por una reeducación alimentaria, sin productos procesados ni azúcares añadidos

La presión social por la imagen corporal incrementa la popularidad de este tipo de dietas.

La presión social por la imagen corporal incrementa la popularidad de este tipo de dietas.ITMAR FABREGAT

Creado:

Actualizado:

En:

¿Cree que ahora hay una mayor preocupación por tener un buen estado de salud?

Sí, cada vez son más las personas que acuden a la consulta para aprender hábitos alimentarios saludables, no solo en los meses de verano. Sin embargo, muchos piensan erróneamente que los productos para adelgazar funcionan. Quieren perder peso de manera acelerada pero aquí no gana el más rápido, sino aquel que aprende a mantener estos hábitos saludables para siempre.

El 49,7% de los leridanos de entre 18 y 74 años tienen exceso de peso, según el último Informe de Salud

La mitad de los leridanos de entre 18 y 74 años tienen exceso de peso. ¿A qué puede deberse?

Debido al estrés del día a día, estamos acostumbrados a comer cualquier cosa para salir del paso y esto, como se ha demostrado, provoca graves problemas de salud a la larga. Consumir muchos alimentos preparados y bebidas azucaradas, sumado a un nivel de vida sedentario, hace que un porcentaje tan alto de la población tenga sobrepeso.

¿Cuál sería la mejor manera de adelgazar?

Además de intentar hacer entre 10.000 y 12.000 pasos al día, hay que mantener una dieta rica en frutas y verduras de proximidad, así como tener en cuenta las raciones diarias de proteínas. También es preferible hacer cuatro o cinco comidas ligeras al día que hacer muy pocas y copiosas. Aun así, lo principal es inculcar estos hábitos alimentarios saludables para que perduren para siempre.

¿Cuál es el problema de la mayoría de dietas exprés?

El problema es que no hay un control continuo por parte de un especialista y, al no producirse esta reeducación alimentaria, después del corto período de tiempo que dura la dieta el paciente vuelve a comer igual de mal que antes y se produce un efecto rebote: puede ganar incluso más peso del que había perdido. Además, al tratarse de dietas extremas que restringen de forma drástica algunos alimentos, hay un déficit de macronutrientes y micronutrientes que pueden derivar en graves problemas para la salud y disfunciones en el organismo.

La presión social por la imagen corporal incrementa la popularidad de este tipo de dietas.

La presión social por la imagen corporal incrementa la popularidad de este tipo de dietas.ITMAR FABREGAT

tracking