Moros i Cristians se retan por el poder

“Los políticos siempre tiran la piedra y esconden la mano”. Esta es prácticamente la única afirmación en la que ayer estuvieron de acuerdo el conde cristiano y el caïd moro que protagonizaron el discurso de las Ambaixades en la plaza de la Paeria, precedido al mediodía por un vermut medieval. Hubo diálogo pero no acuerdo por lo que esta tarde de nuevo habrá guerra entre comparsas moras y cristianas para tener el poder en la ciudad de Lleida. En un satírico guión escrito por el Postureig de Lleida, los dos mandos libraron un batalla diálectica marcada por el contexto político actual. “¡Tengo tres másteres de la Juan Carlos I!”, advirtió el noble cristiano en un intentó por la ocupación de Larida. El caïd le hizo unas cuantas peticiones para su rendición. Así, pidió que “¡No ataques los CDR, nuestros Comités de Defensa del Ramadán!”. A lo que el mando cristiano le respondió que seguirán manteniendo el “¡CLV, nuestro 155 en números romanos!”. El acuerdo no fue posible. La alcaldesa accidental, Montse Mínguez, recordó que este año “será el de la batallas de moras y cristianas”, haciendo referencia a que este año son dos las mujeres que están al frente de las capitanías de ambos bandos, por un lado Judit Badenes, capitana cristiana de los Pallaresos, y por otro Carmina Pardo, por parte de la comparsa mora de los Al·leridis, en la cuarta vez que dos mujeres ostentan las capitanías en las 23 ediciones de la fiesta, que cada año alterna a sus ganadores.