SALUD TABAQUISMO
El tabaco, detrás del 75% de los infartos de menores de 45 años
El Arnau de Vilanova atiende cada año una cuarentena de infartos en personas menores de 45 años y en el 75% de estos casos el tabaco está implicado o es incluso el único factor causante. En los pacientes de más edad con esta patología también está presente, pero no en tanta proporción porque aparecen otros factores como la hipertensión, el colesterol o la diabetes. Así lo alerta el doctor Fernando Worner, responsable del Servicio de Cardiología del hospital leridano, que trata cada año 650 infartos, de los que el 6% corresponde a menores de 45 años y suelen ser los de tipología más grave. “El porcentaje es pequeño pero porque la mitad de pacientes de este grupo de edad que sufren esta patología mueren antes de llegar al hospital” apunta Worner. Y es que el tabaco es el mayor factor de riesgo para dañar la capa de células que tapiza el interior de las arterias, lo que provoca que se formen placas de grasa y se obstruyan. “El tabaco es malo a cualquier edad, pero en los jóvenes más. Y se puede dejar de fumar. Al cabo de un año de hacerlo, el riesgo de infarto por tabaquismo se reduce entre un 30% y un 50% y cuando ha pasado una década se equipara al del resto de la población. Hay que buscar un estímulo y hacerlo antes de tener un infarto”, afirma Worner, que también alerta de que el riesgo aumenta mucho a partir de los dos o tres cigarrillos al día. Cada año ingresan en Cardiología del Arnau casi 1.500 pacientes, de los que el 35% son fumadores. “El tabaco afecta a las coronarias y también es fuente de ictus, insuficiencias renales o impotencia precoz”, concluye Worner.
Reclaman precios más elevados Los profesionales de la Xarxa de Prevenció del Tabaquisme de Lleida, que se presentó ayer en la plaza Ricard Viñes con motivo del Día Mundial sin Tabaco, reclamaron encarecer el precio de los cigarrillos, financiamiento público para los tratamientos de desintoxicación y paquetes genéricos como medidas para seguir luchando contra el tabaco. Y es que esta adicción provoca una muerte cada hora en Catalunya, aseguró Francesc Abella, coordinador de la Unidad de Tabaquismo del Santa Maria, que atiende 280 nuevas visitas al año.