Los Camps Elisis, una macroludoteca

Los Camps Elisis se convirtieron ayer en una gigante patio de juegos de 8.000 metros cuadrados que hizo las delicias de los más pequeños. El calor y el buen tiempo acompañaron una jornada lúdica en la que participaron, por décimo año consecutivo, las ludotecas públicas de los barrios de Balàfia, la Bordeta, Cappont, Centre Històric y Parc de Gardeny, que celebraron su veinte aniversario con más de trescientos juegos y talleres, con una especial afluencia de público en los refrescantes juegos de agua y los juegos tradicionales de madera. Cientos de familias disfrutaron de una macroludoteca en la zona de la Glorieta y el parque infantil de los Camps Elisis, que incluyó juegos de habilidad, talleres pinta-caras, un photocall y un espacio para la primera infancia, entre otras muchas actividades. Como novedad, la décima edición de la fiesta Lleida Juga incorporó juegos de experimentación, con circuitos de psicomotricidad, juegos sensoriales y talleres de creación libre con madera natural. La música también fue igualmente protagonista de una jornada en la que el ayuntamiento preveía superar los 2.000 visitantes de la edición anterior y que contó con la actuación del famosos caracol Banyetes y Skatas como broche de oro.

En la fiesta, organizada por el equipo de educadores de las ludotecas, colaboraron también más de 70 estudiantes voluntarios de la Universitat de Lleida y el Institut Ronda, que orientaron y animaron a los más pequeños en cada taller.

Cientos de familias participaron en una jornada lúdica en la que triunfaron los juegos de agua

En total, las cinco ludotecas municipales atienden a una media de 279 personas al día, siendo el centro de Balàfia el más concurrido, con 76 usuarios diarios y cerca de 340 socios. El objetivo de estos espacios es facilitar la conciliación de la vida familiar y laboral con juegos que estimulan el ingenio y la creatividad de los niños.