Vacaciones en alta mar

Pasar las vacaciones de verano a bordo de un crucero se ha convertido en una auténtica moda, sobre todo para las familias que quieren visitar el máximo de destinos a un precio asequible. Así lo constatan las agencias de viajes leridanas consultadas por este diario, que en algunos casos han incrementado las ventas de pasajes hasta un 20% respecto al año pasado. “Además de que los precios han bajado mucho porque las navieras tienen más barcos, en un solo espacio se ofrece animación para los más pequeños, servicio de Spa y música en directo, entre otras muchas actividades con las comodidades de un hotel” explicó a este diario el responsable de la agencia Ilertravel de Mollerussa, Ramon Gotsens, al mismo tiempo que apuntó que “los clientes buscan ver el mayor número de ciudades en un corto período de tiempo, sin tener que preocuparse por las maletas”. Respecto a los destinos, los cruceros más solicitados siguen siendo los que surcan el Mediterráneo, aunque cada vez tienen más éxito aquellos que recorren las capitales bálticas, las islas griegas y los Emiratos Árabes. “En temporada baja una semana de crucero con pensión completa puede rondar los 200 euros, aunque en los meses de verano asciende a los mil euros”, explican desde la agencia Azul Marino, añadiendo que “la mayoría de familias se decantan por barcos que parten desde Tarragona o Barcelona, por lo que no es necesario coger un avión y los costes se reducen”. Pero las reservas vuelan, por lo que “para coger una habitación triple o cuádruple en agosto hay que mirar las ofertas con meses de antelación”, explican desde Viajes El Corte Inglés. Y es que algunas navieras ya tienen reservas disponibles para el año 2020.

Los cruceros, ciudades con espacio para hasta 6.700 pasajeros Algunos barcos son verdaderas ciudades sobre el mar, con restaurantes, tiendas, espectáculos para toda la familia e incluso casinos. El Symphony of the Seas, de la compañía Royal Caribbean, es uno de los cruceros con la mayor eslora de todo el mundo, con capacidad para 6.700 pasajeros y 1.200 tripulantes. Aunque la mayoría de barcos tienen una capacidad media de 3.000 personas, desde las agencias apuntan que “son los turistas de clase media alta que ya han visitado varias veces los mismos destinos los que se centran en una mejor experiencia dentro del barco, con camarotes grandes y multitud de actividades de ocio”. El puerto de Barcelona, que el año pasado recibió más de 2,7 millones de viajeros, es el primer puerto de cruceros de Europa y la cuarta base mundial después de los tres principales en el estado de Florida (EEUU).