Un bebé de 15 meses, en la UCI intoxicado con cocaína
Sus padres, de 17 y 22 años, detenidos por lesiones y abandono de menores || La Generalitat valenciana asume la tutela
Hospital General Universitario de Elda
Agentes de la Policía Nacional de Alicante detuvieron el pasado 9 de agosto a una pareja, de 17 y 22 años, tras la intoxicación por cocaína y marihuana de su bebé de 15 meses.
Según explican fuentes policiales, el bebé fue llevado al Hospital General Universitario de Elda el pasado 8 de agosto, por sus propios progenitores, donde fue atendido por la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).
Las pruebas toxicológicas a las que le sometieron confirmaron la intoxicación por cocaína y marihuana. Por este motivo, un día después, la Policía Nacional detuvo a los padres como presuntos autores de los delitos de lesiones y abandono de menores.
La madre, de 17 años, pasó a disposición de la Fiscalía de Menores, y el padre, de 22, fue puesto a disposición judicial y ambos quedaron en libertad con cargos, la chica a cargo de su propio padre, al ser menor de edad y a la espera de ser citados por la Justicia.
Tras cinco días en el hospital la Conselleria de Sanidad informó de que el bebé había respondido bien al tratamiento médico y de que recibía el alta. Por su parte, la Generalitat Valenciana declaró ayer al bebé en situación de desamparo y asume su tutela mientras evalúa el entorno de la familia para decidir si en el futuro se quedará en este ámbito o irá a un centro.
Así lo señaló, tras asistir a un acto en Valencia, la consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, que explicó que cuando ocurren casos así en los que un niño da positivo en alguna sustancia tóxica, la Generalitat lo primero que debe hacer es asumir la tutela de ese menor porque “es obvio que en un bebé no se puede encontrar cocaína en su sangre”.
Además añadió que “en este momento se está valorando si estará con una familia o si irá a un centro, en función de cómo vaya evolucionando su salud; lo primero es que tenga estabilizada su salud”.
Preguntada sobre si se sabe a cargo de qué familiar podría quedar el menor, indicó que no y añadió que, en todo caso, no es un dato que se haría público porque es un niño y su seguridad es lo primero y se debe preservar su intimidad ya que “determinadas informaciones que no añaden nada” pueden afectar y comprometer innecesariamente la vida del bebé en un futuro.
