GASTRONOMÍA CERTÁMENES
Éxito de la Fira del Pernil de Balaguer, con 4.000 visitantes
La Fira del Pernil de la capital de la Noguera cerró ayer su sexta edición con un balance más que positivo. Según la Associació Amics de l’Ibèric, que organiza este evento gastronómico en colaboración con el ayuntamiento, cerca de 4.000 personas disfrutaron de las catas de jamón y embutidos durante todo el fin de semana, “un gran incremento de visitas respecto al año pasado que se debe al nuevo emplazamiento de la feria”. En esta ocasión, la decena de paradas de productos ibéricos, vinos y embutidos de calidad se volvieron a trasladar al entorno de la estación de tren de Balaguer, “una zona céntrica y al aire libre que ha propiciado que hubiera un goteo constante de visitantes”, por lo que “para el año que viene intentemos que se celebre en el mismo lugar porque cuando estábamos en el pabellón Molí de l’Esquerrà, no tuvimos tanto éxito. En verano a la gente le apetece disfrutar del calor y el buen tiempo al aire libre”. En esta línea, el presidente de la asociación, Miquel del Aguila, apuntó que la jornada más multitudinaria tuvo lugar el sábado por la noche, cuando acudieron unas 2.500 personas que disfrutaron de la música en directo del grupo sevillano Ajetreo. La novedad de esta sexta edición era la cata de un jamón ecológico, procedente de una agricultura y ganadería ideada para asegurar una producción cien por cien natural. Además del debut en Catalunya de Ajetreo, los platos fuertes de la feria fueron la Vermutada y la comida popular. Los amantes de la gastronomía y los embutidos también tuvieron la ocasión de observar en directo exhibiciones de cortadores de jamón provenientes de diferentes puntos del territorio.
La Fira del Pernil de Balaguer nació hace seis años con el objetivo de aprender a distinguir los siete sabores de este producto, así como su calidad y la mejor forma de cortarlo. En este caso, un total de doce paradas atrajeron al público con degustaciones de cavas, vinos, jamones ibéricos y quesos. Sin embargo, ya desde sus comienzos las zonas que registran más afluencia de público son la del bar-restaurante, que reparte cenas y comidas populares, así como la del escenario, que pone ritmo a las veladas con diferentes espectáculos de música en directo. En el programa destacaban también los maridajes de productos gastronómicos de proximidad y las catas.