Lleida acoge a 211 menores migrantes que han llegado en patera y sin familia

La llegada masiva de menores migrantes sin familia a Catalunya, la mayoría de ellos tras entrar en la península en patera, ha obligado a la Generalitat a abrir centros y plazas para darles protección. Actualmente, en las comarcas de Ponent hay acogidos un total de 211 de estos menores en 13 centros repartidos por la provincia.

La llegada de menores migrantes que viajan a la península sin familiares, muchos de ellos en patera, y acaban en Catalunya se ha triplicado en el último año, lo que ha llevado a la Generalitat a crear un plan de emergencia para darles acogida e incluirles en el sistema de protección de menores. Según los datos facilitados a este diario por la conselleria de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias, en la actualidad en las comarcas de Ponent están acogidos un total de 211 menores migrantes no acompañados, conocidos como MENA. Tutelados por la Generalitat, que asume su guarda y custodia hasta la mayoría de edad, han sido reubicados en un total de 13 centros distribuidos por las comarcas leridanas. Pese a que la conselleria no ha querido concretar en qué municipios se han abierto plazas de acogida para este colectivo, SEGRE avanzó hace unos días que dos centros han empezado a funcionar en Lleida ciudad y se suman a un tercero que ya había abierto plazas en la capital del Segrià, además de otros en Almacelles o Gimenells.

Bienestar señala que se trata de centros de primera acogida, pisos como los de Gimenells o residencias para jóvenes en proceso de inserción social y laboral, así como centros de emergencia. Estos 211 menores que residen actualmente en algunos de los centros abiertos en Ponent son la mayoría chicos de entre 14 y 17 años que llegaron a Barcelona procedentes de las costas andaluzas tras cruzar el Estrecho desde Marruecos en patera. Sin embargo, la conselleria señala que, aunque ahora mismo hay 211 menores tutelados en las comarcas leridanas, eso no significa que se vaya a atender más, ya que algunos podrían salir del sistema de protección al cumplir la mayoría de edad o si se consigue localizar a algún familiar.

En 2017, las peticiones de asilo en las comarcas leridanas se triplicaron hasta superar el centenar

Desde junio de 2017 y hasta el mes de agosto de este año, la Generalitat ha atendido a 2.203 menores migrantes no acompañados, lo que representa el 25% de los niños y adolescentes que forman parte del sistema de protección. Para su acogida, se ha habilitado un total de 109 centros en toda Catalunya, ubicados en una treintena de municipios, que cuentan con un total de 1.787 plazas. En este último año, el Govern ha abierto 93 centros de primera acogida, de emergencia, pisos asistidos, residencias para jóvenes en proceso de reinserción y servicio de acompañamiento para jóvenes extutelados. Desde Benestar señalan que no se descarta abrir nuevos centros también en Ponent, ya que se van gestionando en función de la llegada de más menores. Un flujo de inmigración que aún se prevé al alza.

El Govern pide más previsión para preparar la acogida La llegada de menores migrantes no acompañados se ha triplicado en dos años. Desde la Generalitat hablan de situación de emergencia, pero señalan que no han dejado de atender a ningún menor que llega a Catalunya en estas condiciones y piden al Estado una mayor previsión para poder preparar la acogida con más tiempo. En la última reunión de las diferentes comunidades autónomas, la directora general de Atención a la Infancia y la Adolescencia, Georgina Oliva, y el conseller de Trabajo y Asuntos Sociales y Familiares, Chakir el Homrani, reclamaron una estrategia global para poder dar una respuesta coordinada e insistieron en que se deben tener detectados los flujos migratorios que permitan planificar la acogida, la generación de plazas, la búsqueda de profesionales y la gestión con las entidades. Otro punto que, según la Generalitat, debe trabajar el Estado es la agilización de procesos de regularización y trabajar en el cumplimiento de los derechos de asilo y ciudadanía. El Gobierno central anunció un fondo de 40 millones de euros para la atención de jóvenes migrantes sin familiares. En 2017, las comarcas de Ponent registraron el triple de peticiones de asilo que en 2016, superando el centenar, las mismas que pidieron refugido en el último cuatrienio.