SOS de Shalom tras el incendio

La Fundació Ilersis-Shalom hizo ayer un llamamiento para encontrar una nueva nave industrial donde poder recuperar la actividad tras el incendio que destruyó su centro especial de trabajo (CET) en el polígono de El Segre. El fuego, que se inició la madrugada del domingo, ha destruido por completo las instalaciones, la maquinaria y los productos que los trabajadores ya habían elaborado de cara a la campaña de Navidad, la época con más trabajo de la entidad. “Ha sido terrible para nosotros y también afecta a muchos clientes y proveedores”, señaló Antoni Siurana, presidente de Ilersis, durante la visita que hicieron los responsables de la entidad a las instalaciones destruidas por el incendio. Las causas se siguen investigando, pero Siurana apuntó que las llamas se propagaron rápidamente por toda la nave a causa del fuerte viento. En las tareas de extinción trabajaron hasta 17 dotaciones de Bomberos pero nada pudieron hacer por salvar la empresa. Según Siurana, la prioridad es hallar una nueva nave y pidió ayuda a las administraciones ya que, señaló, Ilersis necesita que los ingresos fluyan al no contar con capital acumulado para hacer frente a un parón de la actividad. Pese a este terrible suceso, se mostró confiado en que podrán hacer frente a los encargos de Navidad, aunque para ello, admitió, necesitarán hacer una previsión de horas extras y contratación de plantilla de refuerzo. También intentarán renegociar los plazos de entrega de los productos. “Tendremos bastante fuerza empresarial para hacer frente a uno de los momentos más difíciles” , señaló Siurana. Por su parte, la gerente de Ilersis, Teresa Benet, explicó que han tenido que dar vacaciones a una docena de los 40 trabajadores del CET, mientras que el resto se ha podido reubicar. Con todo, quiso resaltar que esta situación no pondrá en peligro el trabajo de nadie, y menos el de las personas con discapacidad.

"Se ha perdido maquinaria y trabajo que hemos acumulado en 20 años"

Antoni Siurana y Teresa Benet, presidente y gerente de Ilersis.

La Fundació Ilersis-Shalom aún está haciendo el informe que cuantifica los daños causados por el incendio. Sin duda, según señalaron sus responsables, serán cuantiosos y podrían ser millonarios, ya que en la nave había maquinaria específica que se adaptaba a las necesidades de los trabajadores con discapacidad y de los clientes, además de material y productos ya manufacturados que cubrían el trabajo hasta finales de año. La gerente, Teresa Benet, señaló que toda la maquinaria ahora perdida se había acumulado en los últimos 20 años, una pérdida, afirmó, que también afecta a la treintena de trabajadores del centro de trabajo de Pardinyes.

“El disgusto es grande. Ya teníamos toda la previsión para hacer frente a los pagos y ahora tenemos la profunda decepción de haber perdido una maquinaria tan valiosa y específica”, se lamentó Benet. Una maquinaria propia, que aún estaban pagando en algunos casos, y también prestada por los proveedores, a los que han solicitado su restitución para recuperar la actividad.

Para Benet, el objetivo ahora, además de valorar los daños, es normalizar la situación de los trabajadores y dar salida a los pedidos de los clientes. Para ello, están buscando “todas las vías posibles”, incluso negociar con la competencia para la compra de material, apuntaron los responsables de la entidad. “En en la nave había 20 años de trabajo aplicado. Ahora nos encontramos ante la difícil situación de tener que empezar de cero y recuperar el proyecto y la dedicación”, afirmó Benet. Asimismo, también quiso agradecer todo el apoyo recibido tras el incendio, tanto de las administraciones como de las diferentes entidades de toda Catalunya. “Es una empresa importante para Lleida porque damos un servicio a la sociedad”, dijo Antoni Siurana.