Las pseudociencias, fuera de las universidades y centros de salud

La ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, María Luisa Carcedo, y el ministro de Ciencia, Innovación y Universidades, Pedro Duque, presentaron ayer el Plan para la Protección de las Personas frente a las Pseudoterapias con el que se pretende, entre otras medidas, eliminar prácticas como la homeopatía o la acupuntura de los centros sanitarios y las universidades. Este plan, que se presenta hoy a las comunidades autónomas en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), tiene como objetivo principal informar a la población sobre la realidad de estas técnicas, “sobre las que hay que recordar, no hay evidencia científica” y que “luego elijan con libertad. Pero es imprescindible que tengan primero el conocimiento”, explicó Duque. “Hemos constatado que hay una cierta confusión en la sociedad entre terapias o prácticas médicas basadas en el conocimiento y las que no tienen este aval. El uso de las pseudoterapias no es residual y puede tener efectos perjudiciales para la salud, tanto de forma directa como indirecta”, argumentó Carcedo.

En ese sentido el ingeniero agrícola, investigador y profesor de la Universitat de Lleida (UdL), Estanislau Fons, celebró que el Gobierno haya tomado esta decisión ya que según él en la universidad no hay cabida para este tipo de “creencias”. “Cada uno es libre de pensar lo que quiera, pero que un profesional sanitario practique reiki es peligroso. Hay personas que han llegado incluso a dejar sus tratamientos por culpa de la homeopatía”, aseguró Fons.